$ 53 millones en ventas a domicilio en el primer día de la fase de distanciamiento

El presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil, Pablo Arosemena, informó que en el primer día de la fase de distanciamiento (lunes 4 de mayo de 2020), se registraron ventas por $ 53 millones, concretados online o por teléfono.

Arosemena dio a conocer esa cifra en una reunión virtual encabezada por el titular del MIES, Iván Granda, sobre «Los desafíos del sector productivo en el marco de la disciplina social». A una pregunta de El Telégrafo, precisó que básicamente se trata de ventas represadas, básicamente de electrodomésticos y vestimenta.

A ello se suma, reparación de equipos electrodomésticos (licuadoras, lavadoras, etcétera), venta de muebles, flores y cosméticos.

Dijo que es una «buena noticia» porque son ventas formales, que generan liquidez, permiten sostener empleo y generar recursos al Gobierno recursos para seguir adelante con la tarea titánica de transferir recursos a quienes más lo necesitan.

Arosemena se pronunció porque, previa evaluación de la situación sanitaria del país, y siguiendo las reglas establecidas por el Comité Nacional de Operaciones de Emergencia (COE), los cantones evalúen la posibilidad de abrir el comercio formal, para evitar la caída del empleo.

Según estimaciones citadas por él, a causa de la situación generada por la pandemia, con la paralización del sector comercial y productivo, se pierdan 135.000 empleos en el país.

Y, añadió, en caso de que la recesión continúe, la cifra podría elevarse en medio millón de puestos perdidos. Anotó que la facturación a nivel nacional, como Federación Nacional de Cámaras de Comercio, es que en este año en poco más de 50 días de paralización de las actividades, esta ha caído ya en más de $ 10.787 millones». «Eso es el equivalente en este punto del camino a casi tres terremotos de los que el país sufrió en el 2016», aseveró. Por otra parte, mencionó en base a esas estadísticas, que las pérdidas en la actividad comercial son $ 5.552 millones.

Indicó que en su opinión, lo que va a ayudar no es poner impuestos ni otorgar subsidios, sino permitirle al comercio formal abrir, con todos los protocolos de bioseguridad, para evitar la pérdida de más empleos. «Van a generar un flujo de caja que les va a permitir sostener empleos, lo cual es clave para evitar el problema de una recesión prolongada», concluyó.

FUENTE: EL TELEGRAFO

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