Wall Street tuvo un buen día este jueves, después de una semana tumultuosa en la que llegó a borrar todas las ganancias de lo corrido del año. Al cierre, el promedio industrial Dow Jones subió un 1,63 por ciento, a 24.984 puntos, mientras que el S&P 500 avanzó 1,86 por ciento, a 2.705 unidades. El Nasdaq, en tanto, ganó un 2,95 por ciento, a 7.318,52 unidades.

EUROPA AL ALZA

Las bolsas europeas terminaron este jueves en su mayoría al alza y recuperaron pérdidas, en una jornada en la que fueron determinantes las decisiones del Banco Central Europeo (BCE) que ha mantenido los tipos de interés sin cambios.

El Consejo de Gobierno del BCE, con sede en Fráncfort (Alemania), anunció que mantenía en el 0% los tipos de interés de referencia a los que presta a los bancos semanalmente y ha confirmado el ritmo de normalización de su política monetaria ya que comprará deuda hasta finales de diciembre.

Al comienzo de la actividad bursátil de este día, los mercados se preparaban para una sesión difícil, una vez que el Dow Jones neoyorquino se dejó ayer casi el 2,5 % y el Nasdaq más del 4 %, en tanto que el mercado de Tokio cerraba con pérdidas del 3,72 %.

En Europa, los principales mercados han cerrado hoy la sesión con ganancias, del 1,78 % en Milán, del 1,60 % en París, del 1,03 % en Francfort y del 0,59 % en Londres.
La bolsa española subió hoy un 1,24 % (107,8 puntos) hasta los 8.785,2 puntos, animada por la recuperación de los bancos, por el tono alcista en los principales mercados europeos y por la relativa tranquilidad en los mercados de deuda, monetario y de materias primas.

Las incertidumbres de los mercados persisten con varios frentes abiertos en forma de guerra comercial, signos de ralentización del crecimiento, inestabilidad geopolítica y dudas sobre cómo acabará el ‘brexit’ y los resultados de la segunda vuelta de las elecciones brasileñas, y todo eso se traduce en volatilidad.

Draghi, por su parte, atisbó algunas debilidades en el crecimiento pero nada suficientemente perturbador como para cambiar los planes de retirar estímulos monetarios a final de año. El italiano avisó de que los últimos datos económicos disponibles han sido «más débiles de lo esperado», pero son consistentes con una expansión amplia de la economía de la zona del euro y la subida de la inflación.

El presidente del BCE se refirió también a la situación presupuestaria de Italia y al enfrentamiento que el Gobierno populista italiano, integrado por los antisistema del Movimiento Cinco Estrellas (M5S) y la ultraderechista Liga, mantienen con la Comisión Europea.

Draghi insistió en que su país debe aplicar las normas y apuntó a que se han producido contagios «limitados» de las subidas de los tipos de interés en Italia a otros países de la zona del euro, que no están en el centro, sin mencionar explícitamente a España y Portugal.

En España, los mercados de renta variable cerraron la sesión con ganancias, sustentadas por el rebote de los bancos tras sesiones de caídas por la sentencia del Supremo sobre hipotecas, pero los precios de las acciones siguen en mínimos de hace casi dos años en un clima general de volatilidad que se extiende por todo el mundo.

FUENTE: DIARIO PORTAFOLIO (CO)