Quito – El ministro de Economía, Richard Martínez, habla sobre subsidios, deuda, el FMI y oportunidades para el país en el 2019. Dice que no todo es malo. Destaca que 300.000 personas se hayan beneficiado con la remisión tributaria. Considera que la Ley de Fomento Productivo es potente, pero reconoce que el año se cerró con $ 1.200 millones de atrasos.
El Gobierno habla de transparencia, pero no se explicó de subsidios y nos informan a cuentagotas…
El Gobierno no ha ocultado información por principio de transparencia. Es posible un error de comunicación. Cuando se envió la proforma fue acompañada por un boletín que hablaba de baja de subsidios por $ 800 millones. Lo importante es que las personas que más tienen empiecen a pagar y sinceremos la economía. Debemos corregir distorsiones.
Transportistas pesados no descartan paro, ¿cómo será la compensación?
Es un mecanismo en el que se está trabajando. En este momento una paralización o convulsionar el país sería bastante irresponsable con lo que el país necesita. Nosotros somos un gobierno de diálogo, pero también uno que actúa con firmeza para que no se caotice el país. Con los taxis ya hay prácticamente un acuerdo. En el diálogo, no es solo ir a pedir, sino ponerse de acuerdo.
¿Habrá otros ajustes a subsidios en combustibles?
Vamos a corregir cuantías mínimas, un mecanismo que se creó para entregar un cupo de 2.000 galones de diésel a pequeñas empresas, escuelas, hospitales y que se terminó utilizando mal por grandes empresas. Saldrá un acuerdo ministerial en estos días.
¿Cuánto dejará de pagar el Estado por subsidios?
Esperamos cumplir con $ 800 millones en 2019. El objetivo de déficit se mantiene: $ 3.600 millones, es decir, 3,2% el PIB.
Algún analista decía que los pobres no viajan en taxi…
No queremos que le suban la tarifa al ciudadano. Creo que hay que pensar en toda la población. Posiblemente a los pobres no, pero la clase media sí. Tenemos que pensar en la clase media y por eso estamos reestructurando sus deudas en la banca pública. Una clase media activa y vibrante mantiene el consumo y mayor emprendimiento a futuro.
¿Cuándo llegan los $ 900 millones de China?
Esperamos que el tramo A, que es de $ 675 millones, llegue hasta enero y el tramo B, que es en yuanes ($ 225 millones), deben desembolsarse en función de los proyectos.
¿Proyectos con empresas chinas?
Sí. Pero véalo positivo. No hemos comprometido más crudo. Es una tasa ponderada menor a la anterior. Lo que sí hay que hacer es corregir los problemas anteriores. Debe estar lista en el Viceministerio una norma que incrementa los estándares de calidad con los que se entregarán las obras.
Analistas dicen que debe haberse comprometido algo para lograr la tasa tan baja.
Perdón. Pero es la palabra del analista frente al documento de contrato, a la de la autoridad.
¿No hubo colaterales ni otro tipo de compromisos?
No se ha entregado un barril más de crudo. Lo que se hizo fue reprogramar varios cargamentos ya comprometidos. Me parece insólito, con respeto a los analistas, que porque no creen no sea verdad. Deberían alegrarse. No vamos a mentirle a nadie. Que se quiera tergiversar la verdad, eso es poco responsable con el país.
Al prepagar la preventa, quedó liberado petróleo. ¿Este se comprometió para el crédito?
Se reprogramó y se redujeron los niveles de embarque y se extendieron los plazos. Y con una tasa bien negociada. Alegrémonos por el país.
¿Cuál es la situación de las reservas internacionales?
El problema de la reserva es estructural. El Gobierno anterior decidió expandir el balance del BCE y financiar el déficit con los recursos de la Reserva. En 2019 un objetivo es fortalecer la posición de reservas. Estamos tomando decisiones dentro de cuatro pilares: consolidación fiscal y estabilidad monetaria; igualdad de oportunidades y protección social; empleo y reactivación productiva y manejo transparente de los recursos.
¿Estas correcciones nos pueden acercar al FMI?
Un acuerdo con el Fondo debe generarse siempre y cuando se acompañe a lo que está planteando Ecuador, este plan de cuatro pilares. Esa opción que tiene bondades, pero dentro de esta dinámica de una reducción del Estado y del déficit gradual, que es criticada por algunos. Hay documentos del BM que indican que ajustes graduales son menos perniciosos en la parte social. Si en estas decisiones de transitar del modelo del socialismo del siglo XXI a otro más ordenado y sostenible se dan las condiciones para que el FMI acompañe, enhorabuena.
Vimos proveedores impagos protestando. ¿Qué harán?
El nivel de atrasos está en $ 1.200 millones. Tenemos un plan de pagos, debemos escucharles, están en su justo derecho, pues han entregado un bien o un servicio, pero del otro lado tenemos una realidad compleja. Hay que administrar las prioridades.
¿Qué noticias positivas hay para la ciudadanía?
Yo creo que las buenas noticias son que estamos enrumbando la economía, ordenándola para que nuestros hijos no tengan que afrontar medidas más duras. La Ley de Fomento Productivo es una buena noticia, pago a jubilados, salida de la Central de Riesgo, el administrar con rigurosidad los recursos del Estado, son buenas noticias. El 2019 va a ser un año importante de reactivación para los ciudadanos.
FUENTE DIARIO EL UNIVERSO (EC)