«Nos interesa el concurso de todos los participantes de la cadena para que entre todos le demos legitimidad al ejercicio” dijo el ministro de agricultura, Andrés Valencia Pinzón.
El ministerio de Agricultra anunció que inicio el plan de trabajo que permitirá la construcción participativa y establecimiento de metas para el ordenamiento de la producción de aguacate, producto con alto potencial exportador.
Este plan está enmarcado dentro dentro de ordenamiento de la producción agropecuaria en 2019 al que le apuesta el ministro de Agricultura, Andrés Valencia Pinzón.
“Este plan se está construyendo con productores, gremios, asociaciones, empresarios, entre otros actores de la cadena. Nuestro desafío es generar valor agregado, diversificar mercados y consolidar una cadena de clase mundial que nos permita llevar lo mejor del aguacate colombiano a los consumidores del mundo”, dijo el ministro Valencia. (De interés: De la crisis cafetera al aguacate de exportación).
Se acordó un plan de trabajo que contempla la conformación de mesas técnicas de trabajo y las cuales tendrán lugar entre febrero y marzo. La Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (Upra) identificará las áreas con alto desempeño productivo para el cultivo y establecerá de la mano de la cadena una planificación indicativa de las siembras. (De contexto: Aguacate Hass colombiano será protagonista en el Super Bowl).
Dice el comunicado de prensa del Ministerio de Agricultura que dentro de los primeras aproximaciones realizadas por el Ministerio y la UPRA, se han identificado desafíos para la actividad de siembra, producción y comercialización de aguacate Hass. Se espera consolidar la organización de la cadena; diseñar una estrategia para el fortalecimiento del seguimiento, monitoreo y control de las zonas libres para la admisibilidad sanitaria; generar valor agregado conducente a la diversificación de mercados; incentivar la asistencia técnica para la implementación de paquetes tecnológicos; y promover la certificación bajo protocolos de trazabilidad, calidad e inocuidad.
FUENTE: DIARIO EL ESPECTADOR (CO)