El nuevo modelo de gestión del Senae se orienta al fortalecimiento de la inteligencia y a la identificación de los operadores de comercio exterior.
En 2019 la Aduana del Ecuador realizó varias acciones para fortalecer la inteligencia aduanera que busca eliminar la corrupción y luchar contra el contrabando.
Este proceso se efectúa mediante información interinstitucional e interaduanera, que busca romper barreras no arancelarias como tiempos, servicios, procesos y tecnología.
Un hito importante para Ecuador fue realizar el primer catastro de operadores de comercio exterior y establecer al Registro Único de Contribuyentes (RUC) como único código de comercio interno y externo.
“Esto permitió que de 58.000 operadores registrados en la Aduana, solo 26.000 pasen el proceso de calificación”, según indicó María Alejandra Muñoz, directora del Servicio Nacional de Aduanas del Ecuador (Senae) a este diario.
En el proceso también era importante hacer la trazabilidad de información y de movimiento de dinero, por lo que se firmó un convenio con la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE) y el Servicio de Rentas Internas.
Entre los resultados se han encontrado operadores con RISE que importaban más de $ 300.000 al año, cuando la normativa tributaria les permite solo hasta $ 60.000. También personas naturales que no eran obligadas a llevar contabilidad, pero sus movimientos de compras en el comercio internacional eran superiores a lo legal.
El Senae transmite esta información al SRI para que el órgano de control tributario haga los cambios respectivos.
Por su parte, Ricardo Valero, miembro del directorio de la Cámara Ecuatoriana Americana (Amcham), cuenta que ahora se ve reflejada una disminución en los tiempos de desaduanización. “De cinco pasó a casi tres días, lo que no ocurrió en 10 años”, señaló.
Considera que aún está pendiente la aplicación de la figura internacional de Operador Económico Autorizado, cuya certificación dará facilidades a importadores y exportadores.
Intercambio de información
Ecuador se abrió al mundo, utiliza la inteligencia aduanera y se alimenta de países de la región como Estados Unidos. Esto permite tener información de la mercadería que viene para mejorar los controles. “Sabemos qué viene y quién declara en el país de origen. Con esta información podemos hacer una inteligencia previa”, indicó Muñoz.
La titular de esta entidad explicó que en la Aduana existían 4.400 normas para regular el comercio internacional. En 2019 se emitieron 20 resoluciones enfocadas a la facilitación del comercio, lo cual es confirmado por Fernando Barciona, gerente General de Almacenes Boyacá, quien asegura que la Aduana ha mejorado notablemente, tanto en velocidad de respuesta como en el mejoramiento de procesos internos.
“Antes sacar una mercadería tomaba hasta 15 días, hoy en día se lo hace en tres. Cuando se hacía un reclamo había que esperar varias semanas y ahora pocos días”, aseguró.
Otro proceso de control es la oficina de Fortalecimiento Ético y Lucha contra la Corrupción, que busca que los funcionarios den un buen servicio a los clientes. Han sido recibidas cerca de 300 denuncias.
Muñoz explicó que esto es un proceso de formalización. “Hacerle más fácil la vida a los formales, por eso es necesario corregir a quienes no cumplen”, finalizó. (I)
FUENTE: EL TELEGRAFO