El cierre temporal del mercado El Arenal en Cuenca, hace más de 10 días, ha provocado varios problemas de salubridad, reclamos e incomodidad a los vecinos de los sectores cercanos a la plataforma de Narancay, situada en la parte sur de la ciudad.
Los habitantes del Carmen del Guzho reclaman e indican que es un foco de infección la zona, por cuanto los vendedores y amas de casa se han tomado las aceras de todo este lugar para vender sus productos.
En una primera reunión que se dio el último fin de semana, entre dirigentes del mercado y autoridades de la Municipalidad, se buscaron acuerdos de ubicación mientras se soluciona el problema del mercado El Arenal, donde se pretende hacer una reestructuración para facilidad de los vendedores, como también para aquellos que van de compras. En la reunión presidida por el alcalde, Pedro Palacios, se llegaron a consensos en la necesidad de intercambiar información para determinar el número de comerciantes que puede acoger El Arenal, sin poner en riesgo la salud de las personas.
Esto tomando en cuenta que por la pandemia únicamente podrán trabajar los que desarrollan actividades relacionadas a la venta de productos de consumo masivo, como actualmente ocurre en los otros mercados de la ciudad.
Palacios indicó que luego del diálogo, de parte de los comerciantes existe la predisposición para apoyar la reestructuración con base en estudios elaborados por la Fundación El Barranco.
Entre los cambios más significativos que se harán en el mercado El Arenal están los ingresos y salidas controlados, túnel de desinfección, el vallado del centro de abasto por la calle Roberto Crespo para mejor control y que los puestos tengan los dos metros de distancia entre sí; también la ampliación de pasillos, como recomiendan las normas sanitarias para evitar la propagación del covid-19.
De igual forma, se planteó el tema de la plataforma de Narancay donde provisionalmente cumplen sus labores los mayoristas de El Arenal. En este espacio se han generado problemas “porque llegaron comerciantes de otros giros de negocios causando malestar y problemas”. Sin embargo, se dijo por parte del director de Mercados, Marcelo Álvarez, que se han tomado correctivos para que durante el tiempo que deban laborar en ese lugar se lo haga de manera digna.
Se indicó que en el sector de Narancay existen baterías sanitarias y garantías de seguridad por los controles permanentes. De su lado, los comerciantes pidieron ser atendidos ya que, según ellos, este sitio es la fuente de trabajo.
Edwin Ochoa, comerciante, cuestionó la decisión de trasladarles a la plataforma de Narancay donde, dijo, no hay agua, luz ni baterías higiénicas. “El Arenal es nuestra casa, pobre y digna, de allí vivimos y comemos. Este es el mercado de los pobres”, afirmó.
FUENTE: EL TELEGRAFO