Así se lo afirma en un documento elaborado desde el  Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional.

De acuerdo a un documento del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional, el norte de Guayaquil, Santa Elena y Manabí, así como las provincias de Bolívar, Chimborazo, Cañar, Tungurahua y Cotopaxi, pueden transformarse en los siguientes territorios de epidemias explosivas.

A esta conclusión llegó un grupo de académicos y científicos del Instituto Geográfico Militar, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, el Ministerio de Telecomunicaciones, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, el Centro de Inteligencia Estratégica y dos docentes de la Universidad Central y la Universidad de Cuenca.

Estas personas desarrollaron un documento denominado ‘Covid-19 en el Ecuador. Tendencia temporo espacial de la pandemia del 27 de febrero al 19 de abril del 2020’, con el objetivo de caracterizar el comportamiento temporo – espacial de la pandemia en el país, a fin de establecer escenarios que permitan la toma adecuada de decisiones en los diferentes territorios, además, de establecer qué escenarios epidémicos están conformados y cuáles son sus proyecciones.

En este mismo documento se establece que el patrón de transmisión del Covid-19 en el Ecuador está estrechamente ligado a la movilidad de las personas entre ciudades.

También se señala que el foco inicial, que se dio en Guayaquil, generó transmisión exponencial del virus y la dispersión que se dio en el territorio está asociada a las vías de comunicación terrestre.

Basados en los datos del estudio se incluyen algunas recomendaciones, entre las más importantes está mantener las medidas de restricción de movilidad social adoptadas y evaluarlas semanalmente, además, las nuevas decisiones se deben sustentar en información precisa, actualizada y oportuna.

Realidad

El estudio establece que Tungurahua podría transformarse en un foco de la pandemia. En la actualidad presenta 206 casos confirmados de Covid-19, de los cuales el 83% se concentran en Ambato.

El 23 de marzo se presentó el primer caso en Tungurahua, teniendo un crecimiento exponencial en las últimas dos semanas donde se han reportado 135 nuevos casos, pero la preocupación se centra en el estéril trabajo de las autoridades para controlar las grandes aglomeraciones que se han dado, sobre todo en Ambato, vinculadas al sector informal del comercio.

Esta preocupación viene acompañada de cifras. Según el último informe del ECU-911, la central de emergencias, desde el 14 de marzo hasta el 5 de mayo, registró 26 mil 277 alertas de aglomeraciones, divididas de la siguiente forma: Quito 18,1%, Guayaquil 13,5%, Ambato 5,8% y Cuenca 5,1%, lo que evidencia la indisciplina ciudadana en varios sectores del país. En mercados ha habido 2 mil 629 avisos relacionados con concentración de personas.

Acciones

Según Javier Altamirano, alcalde de Ambato, desde el inicio de la pandemia se trabajó en campañas de sensibilización para que las personas comprendan que es necesario quedarse en casa y cumplir con las normas de higiene.

Además, se autorizó la apertura parcial del Mercado Mayorista para que se realice la comercialización de productos de manera adecuada, y evitar de alguna manera las aglomeraciones, y se inició el proceso de compra de 30 mil pruebas de Covid-19 para la ciuad.

Migración

Gabriela Rodríguez, gobernadora de Tungurahua, mencionó que los primeros contagios que se dieron en Ambato se relacionaron con familias que migraron a Guayaquil y luego regresaron a la ciudad.

Mientras que en Pelileo, que es el segundo cantón con más casos en Tungurahua, los contagios se presentaron porque las personas comercializaban productos en Guayaquil. “Esto se dio cuando aún no cerrábamos la provincia por completo”, mencionó Rodríguez.

Además, comentó que en un trabajo conjunto entre autoridades locales, cabildos y presidentes de comunas se pudo identificar a las familias o personas que habían llegado de la Costa, para que así el personal del Ministerio de Salud tome contacto con ellas y cumplan con el aislamiento obligatorio por 15 días.

“Entre las primeras medidas, el COE provincial desinfectó las parroquias donde se dieron estos casos y realizó operativos de control con la Policía Nacional y Fuerzas Armadas; también entregó raciones alimenticias a esas familias; buscamos compensar la alimentación para que no tengan la necesidad de salir a laborar acá”, dijo la Gobernadora. (FC)

FUENTE: LA HORA