Los dueños de gimnasios son muy conscientes de que estos establecimientos son unos de los sitios donde hay alto riesgo de contagio del COVID-19, mal que ha mantenido desde hace tres meses al mundo paralizado y expectante.
Es imposible entrenar con mascarilla, quienes se ejercitan cambian de máquinas constantemente, toma tiempo desinfectarlas y peor respetar la distancia de 2 metros.
Por eso estos negocios han tenido que reinventarse para no quebrar. Algunos gimnasios y box de crossfit han optado por alquilar sus equipos para que los alumnos puedan seguir entrenando en sus casas y también han implementado clases y entrenamientos online a través de plataformas virtuales como Zoom.
Todo esto viene acompañado de la asesoría física, nutricional y el seguimiento psicológico y la motivación, asegura Mapi Zambrano, entrenadora de Kallpa, un centro donde se practica crossfit, ejercicios funcionales y hasta yoga.
Todas esas clases están disponibles en línea y asegura la entrenadora que ahora incluso tienen alumnos de otros países, ya no solo están los clientes habituales, por eso cuenta que el gimnasio está por lanzar una página web y una aplicación para subir las rutinas.
Ser parte de estos entrenamientos online, que no tienen límite, cuesta $40 mensuales. Hay clases en la mañana y en la tarde. La mensualidad en Kallpa costaba $100.
Zambrano cuenta que así y con el alquiler de los equipos están manteniendo el negocio y que solo una trabajadora fue liquidada, el resto de los entrenadores han organizado sus grupos y ganan de acuerdo con cuántos alumnos tienen.
Ahí, por ejemplo, un par de mancuernas se alquilan a $50; las barras, a $55; y una caja para practicar crossfit, a $20.
Con respecto al local donde está ubicado el gimnasio, en Samborondón, les han descontado el 10% en el alquiler.
Mapi considera que cuando se acabe la cuarentena y los gimnasios vuelvan a abrir se mantendrán las clases online porque asegura es un nicho en el que están teniendo éxito.
Mario Barone, dueño de Antares Fitness y Sweat by Antares, dos gimnasios ubicados en Los Ceibos y en la vía a la costa, está de acuerdo con Mapi. Él también ha alquilado sus equipos a sus alumnos y está impartiendo entrenamientos virtuales. Aunque es consciente de que faltan meses para retomar la actividad, en los gimnasios ya están adquiriendo cámaras para instalar en los salones y poner transmitir los entrenamientos, quiere continuar con esta modalidad, pues indica que el aforo en las clases no va a ser el de antes.
Mario ofrece un paquete mensual de 70 dólares. “Ahí tienes una programación de entrenamiento y guía nutricional, además la asesoría 24/7 en el grupo de WhatsApp. Si coges este paquete te llega una pesa rusa, una mancuerna y un mat”, detalla el entrenador que indica que también tienen un plan de $50, en el que no están incluidos los equipos.
Durante una crisis unos pierden y otros ganan y es lo que ocurre en este mercado fitness.
A pesar del encierro la gente no deja de ejercitarse y quienes venden implementos deportivos online han triplicados sus ventas. Es lo que le pasó en los últimos meses a The Sport Shop, una tienda virtual que tiene año y medio funcionando, pero que jamás habían vendido tantos productos.
Ellos ofrecen todas las marcas del mercado, envían a domicilio sin costo y aceptan todas las formas de pago.
Álex Almeida, uno de los dueños de la tienda, asegura que lo que más están vendiendo son: colchonetas, pesas, pelotas, implementos para yoga, barras y ropa deportiva.
En Facebook también se promocionan proteínas y suplementos con envío gratis. También hay tatami (piso de caucho) para instalar en casa y no dañar el piso. Cardacio vende el metro cuadrado a $22. (I)
Fuente: Diario el Universo (EC)