Entrar a un vestuario de una tienda departamental o de retail para probarse una prenda es algo que puede demandar un poco más de tiempo, paciencia y mayor cuidado bajo la nueva normalidad que lleva convivir con el coronavirus.
A más de las medidas como el uso de mascarilla y la toma de temperatura al ingreso, hay compañías de este sector que han activado normas para tratar de reducir las posibilidades de contagio y hacer que el consumidor se sienta más seguro.
Etafashion es una de las cadenas que adoptaron cambios en el área de vestidores. En sus locales habilitó solo la mitad de los probadores e implementó protocolos de limpieza y desinfección antes y después del ingreso de cada cliente.
Las prendas de vestir que se prueban los clientes ya no van inmediatamente a las guindolas, sino que pasan a un proceso de aislamiento por 24 horas y antes de volver a las perchas atraviesan un proceso de desinfección con vapor caliente y alcohol.
Camila Camacho, jefa de Marketing de Etafashion, indicó que para controlar el aforo que deben cumplir han implementado pantallas que permiten al cliente visualizar el aforo permitido, como el aforo en tiempo real de la tienda.
El aforo varía con base en el metraje de cada una de las tiendas. Actualmente la cadena está trabajando con el 30 %. En algunas esto implica que reciba entre 80 y 130 personas de manera simultánea.
De Prati, que abrió sus tiendas en Guayaquil, Quito y Manta, también activó lineamientos para proteger desde la llegada del cliente, la disposición de mercadería, compra en caja hasta la entrega del producto al cliente y su salida.
Soledad Ponce, gerente sénior de Marketing de De Prati, señaló que para fomentar las medidas de distanciamiento decidieron dar más apertura entre los muebles de la mercadería para facilidad de movilización por la tienda.
Además, redujeron la cantidad de prendas que se exhiben en las perchas para que el cliente encuentre con mayor facilidad lo que busca. El propósito es evitar que se toquen los artículos con más frecuencia.
Los vestidores de las tiendas se encuentran habilitados al 50 % y son desinfectados por el personal de cada una de ellas.
Ponce dijo que la mercadería que ha sido devuelta por los clientes aplicando el sistema de la garantía incondicional o después de una prueba de vestuario entra en una fase de desinfección y cuarentena.
Para asegurar el cumplimiento de los aforos permitidos, De Prati ha implementado también un sistema tecnológico para la contabilización en tiempo real.
Otras tiendas como Adidas en Ecuador han adoptado medidas similares. En los establecimientos de esta cadena, por ejemplo, se usan calcetines para las pruebas de calzado, así como el aislamiento y desinfección de las prendas usadas en probadores. En la caja están tratando de impulsar los métodos de pago con tarjetas y la desinfección de manos antes y después de la interacción.
Juan Carlos Ruales, gerente de Marketing de Adidas en Ecuador, afirma que el sistema de bioseguridad que han implementado permitirá generar una nueva experiencia de compra en estas circunstancias. (I)
Medidas en despacho de compras web
En medio de la emergencia, las tiendas departamentales y otras del sector retail fortalecieron su canales de venta online o través de apps. Pero ¿qué tratamiento recibe esa mercancía que se despacha en ese sistema de compra? De Prati indicó que para las compras que se efectúan en su web han implementado protocolos de bioseguridad en su centro de distribución, desde la preparación de la compra, el empacado, hasta las precauciones necesarias para la entrega al cliente.
Adidas, que habilitó un sistema de compras con la app de Rappi, indicó que en este proceso se usan implementos de protección, distanciamiento productivo y métodos de limpieza que garanticen la higiene de los productos en el despacho y la posterior entrega al cliente. (I)
Cadenas optimizan sus normas
Las cadenas de supermercados, que tienen líneas de ropa y electrodomésticos, han ido afinando las medidas que comenzaron a aplicar desde que arrancó la emergencia.
En los supermercados de la Corporación El Rosado, que maneja los formatos de Mi Comisariato, RioStore, Ferrisariato, se desinfectan constantemente las carretillas de compras y se ha mejorado la señalética en las paredes y pasillos, donde se insta a que el recorrido sea unidireccional.
Tía tiene puntos para la desinfección de calzado al ingreso de sus locales, toma de temperatura corporal y rocía gel en las manos a los clientes.
Rubén Salazar, gerente corporativo de Corporación La Favorita, propietaria de Supermaxi, Megamaxi y otras marcas, dice que dentro de sus protocolos está la toma de pruebas de COVID-19 al personal que presente síntomas o para descartar cualquier duda.
Para activar y supervisar sus protocolos de bioseguridad, asegura, designaron a varios funcionarios distintas responsabilidades. (I)
FUENTE: EL UNIVERSO