Tener problemas para lograr un embarazo es más común de lo que se cree. De hecho, una de cada seis parejas tiene dificultades para lograrlo, pero afortunadamente, en la gran mayoría de los casos hay alternativas a las que se puede recurrir. Lo importante, es realizar un diagnóstico temprano tanto en hombres como en mujeres.
Otra falsa creencia es que el asunto de la fertilidad es exclusivamente femenino, pero resulta que cuando se tienen problemas para concebir, el 40% de las causas son de las mujeres y otro 40% es de los hombres, según estudios médicos.
Para empezar, es importante diferenciar el concepto de infertilidad y esterilidad para saber de qué manera se procede o cuál es el mejor método a seguir para lograr la concepción. “La esterilidad es la imposibilidad de concebir y la infertilidad es la incapacidad para llevar a cabo un embarazo. Es decir, algunas mujeres pueden quedar embarazadas, pero tienen abortos recurrentes y una mujer estéril es que ni siquiera puede quedar embarazada”, explica José Ignacio Madero, médico especialista en Obstetricia y Ginecología y Biología de la Reproducción Humana de la Clínica EUGIN.
Cuando se habla de infertilidad, las causas más comunes en los hombres son baja producción de espermatozoides y obstrucciones que no dejan su liberación adecuada, aunque también por lesiones, problemas crónicos o venas dilatadas alrededor de la bolsa testicular -conocida como varicocele-. Mientras por el lado de las mujeres pueden ser trastornos en el ciclo menstrual, la anovulación, es decir, la ausencia de ovulación, anomalías en las trompas de Falopio o del útero, o una enfermedad pélvica inflamatoria, entre otras.
El tiempo estimado para que una pareja logre concebir, en condiciones normales, es de un año. Pero, si pasado este tiempo y aún más si presentas alguna de las anteriores causas expuestas, hay que buscar ayuda. No dejes pasar mucho tiempo, porque en este caso un factor como la edad, sobre todo en el caso de las mujeres, sí juega en contra.
Para el especialista hay múltiples posibilidades a las que una pareja puede acudir cuando desea tener hijos biológicos. “Implementamos diferentes tipos de tratamientos, unos de baja y alta complejidad. Los de bajas son dentro del cuerpo y consisten en hacer una estimulación ovárica, cuyo proceso empieza al principio del ciclo menstrual y termina alrededor del día 14, cuando este finaliza, con la finalidad de obtener la maduración de uno o máximo dos folículos. Los de alta complejidad ya son mediante la Fecundación In Vitro o ICSI, que consiste en la estimulación de los ovarios con medicamentos, con el objetivo de obtener varios óvulos que una vez extraídos, serán fecundados en el laboratorio con los espermatozoides del donante seleccionado. En este caso el o los embriones obtenidos se seleccionan para ser transferidos al útero de la mujer para que continúen su desarrollo”, enfatiza Madero.
Fuente:Diario El espectador.(Cl).