La serie de interrupciones y retrasos en el transporte marítimo global, a causa del bloqueó presentado en el Canal de Suez, tardarán meses en desvanecerse. Así lo ha señalado la compañía marítima Maersk.
La naviera explicó que por cada día que la vía marítima permaneció cerrada, el efecto dominó o cascada continuó aumentando en la capacidad global y el equipo. Las consecuencias en la cadena de suministro, a raíz de esto, durarán largo tiempo.
Para solventar momentáneamente el problema, Maersk y algunos de sus socios decidieron redirigir 15 barcos alrededor del Cabo de Buena Esperanza, en el extremo sur de África.
Dicha solución fue replicada por MSC, quien redirigió 11 de sus barcos por la misma vía, mientras 19 buques operados directamente y en asociación, se mantienen fondeados en ambos extremos del canal.
FUENTE: CAMAE (EC)