[:es]Bruselas.- Varios líderes de la Unión Europea respaldaron este domingo los planes para revisar a los migrantes en el norte de África y en los Balcanes con el fin de determinar si cumplen los requisitos para recibir asilo, en un contexto en que las tensiones sobre cómo manejar la llegada de miles de personas amenazan con socavar la unidad del bloque.
En conversaciones de emergencia sobre el tema en Bruselas, un grupo de 16 países encabezados por Francia y Alemania intentaban delimitar quién debería asumir la responsabilidad de los migrantes que llegan a Europa -en la actualidad asumida en su mayor parte por Italia, Grecia y España-; cuánto tiempo deberían atenderlos y qué tanto deberían hacer sus socios europeos para ayudarlos.
El posible fracaso en llegar a un acuerdo sobre cómo hacer frente al desafío de la inmigración amenaza el llamado espacio de Schengen, con el que se autoriza el libre desplazamiento dentro de las fronteras de la UE, uno de los mayores logros en los 60 años de historia del bloque.
La cifra de inmigrantes que llegan a Europa ha disminuido en forma significativa este año -la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados pronostica que unas 80.000 personas ingresarán por mar en 2018 si continúan las tendencias actuales-, pero de todas formas la agitación política en la UE sobre el tema se ha incrementado enormemente. Los partidos opuestos a la inmigración -y los gobiernos de Hungría e Italia- han estado fomentando el temor a los extranjeros y se han granjeado apoyo al hacerlo.
Alentados por un acuerdo con Turquía que ha permitido disminuir la llegada de inmigrantes provenientes de ese país en un 97% desde 2015 -cuando cientos de miles de personas ingresaron, en su mayoría huyendo de la guerra en Siria e Irak-, el bloque de 28 naciones está listo para dar luz verde a los planes para establecer centros de revisión en Argelia, Egipto, Libia, Marruecos, Níger y Túnez.
Se está conversando también sobre planes para establecer centros de recepción de migrantes en Albania.
El presidente francés Emmanuel Macron dijo que “el método que vamos a adoptar” involucraría “trabajar juntos cara a cara con los países de tránsito y origen fuera de la Unión Europea”. Mencionó a Libia -el principal punto de partida de los migrantes de distintos países que desean llegar a Europa-, otros países africanos y los Balcanes.
Macron hizo notar que la llegada de migrantes ha disminuido significativamente.
Los primeros ministros de Dinamarca, Bélgica y Luxemburgo también respaldaron la idea de coordinarse con países fuera del bloque para disminuir la migración, aunque hicieron énfasis en la necesidad de respetar el derecho internacional.
FUENTE DIARIO EL UNIVERSO (EC)[:]