La Ley de Fomento Productivo brinda beneficios especiales al sector e incluye a las pequeñas empresas. El Gobierno ejecuta proyectos para atraer ingresos hacia Esmeraldas y Manabí.
El turismo es uno de los sectores priorizados para la aplicación de los incentivos que contempla la Ley de Fomento Productivo. En el evento “Ecuador Destinos de Inversiones”, el ministro de Turismo (e), Carlos Larrea, sostuvo que la norma potenciará la competitividad del sector.
“El turismo es el único sector que va a tener hasta 20 años de exoneración de impuesto a la renta (IR)”. El beneficio aplica a proyectos que se ejecuten en Manabí y Esmeraldas en los próximos cinco años, a las inversiones de las micro, pequeñas, medianas empresas y a las asociaciones de turismo comunitario.
Mediante la ley también se creará una Zona Especial de Desarrollo Económico Turístico. Además, el ingreso de mercadería para ferias y convenciones relacionadas al sector goza de exoneraciones.
Larrea destacó la creación de un fondo de promoción turística para financiamiento de planes y proyectos orientados a facilidades turísticas, mantenimiento y promoción. “La idea es mantenerlo con el tiempo y que Ecuador pueda conseguir más turistas”.
Esta cartera de Estado desarrolla ya programas específicos en Esmeraldas y Manabí. Uno de ellos es el proyecto Riviera del Pacífico que busca atraer inversiones a la costa Pacífica de Ecuador y en una primera fase se enfocará en hoteles grandes y resorts.
Pueblos Mágicos es otra iniciativa que potenciará a pequeñas poblaciones con un cambio urbanístico y dotándolas de infraestructura para incrementar la llegada de visitantes.
Tanto estos programas como el resto de incentivos que propone la ley canalizan el trabajo coordinado para que el sector productivo sea el que dinamice la economía por medio de nuevas inversiones, explicó el ministro de Comercio Exterior e Inversiones, Pablo Campana. Al evento también asistió el ministro de Economía, Richard Martínez.
Dijo que la ley garantiza una trayectoria fiscal de sostenibilidad. “Es garantía de que, al futuro, la política fiscal no va a atropellar a la política productiva que ha sido un mecanismo de divergencia durante los últimos años”, acotó.
FUENTE: DIARIO EL TELÉGRAFO (EC)