El 12 de febrero iniciará el «año del Toro», según el calendario lunar, y para el analista de la industria marítima jon Monroe, si el enero fue un indicio de lo que está por venir, hay espacio para el optimismo, con un proceso de vacunación acelerando en EE.UU. (con un total de 32,78 millones personas, más que ningún otro país del mundo) y con los casos de infección disminuyendo en sus 11 estados más importantes, lo que podría incidir en un ligero respiro a la movilización de contenedores en los puertos del sur de California. Sin embargo, hay algunas condicionantes como el regreso de los blank sailings y la aún constante escasez de contenedores.
En tanto, en China el feriado lunar se prolongará debido a las restricciones de viaje en el país a causa de la pandemia. Las fábricas cerraron temprano y los camioneros empezaron a salir hacia sus ciudades de origen en la semana 4, dado que la nueva normativa gubernamental exige que cualquier persona que viaje fuera de la ciudad en la que se encuentra permanezca en cuarentena durante dos semanas. En el puerto de Shenzhen, el gobierno pidió a los trabajadores que se queden y no viajen a casa, a cambio de una paga extra. Y aunque muchas fábricas pueden permanecer abiertas, tendrán dificultades para entregar el producto a las terminales debido a la escasez de conductores. Es así como, dada la falta de camiones, muchas fábricas cancelaron sus reservas esperando reanudarlas a la vuelta del feriado, lo que por supuesto, también traerá consecuencias.
Servicios cancelados y capacidad extra
La planificación de zarpes en China se mueve entre los extremos de los blank sailings y la implementación de capacidad extra. Según Monroe, se requieren mucho las cancelaciones de servicio, sobre todo en las rutas PSW (Pacific South West) a los puertos de Los Ángeles y Long Beach. Esto debido a que se necesita tiempo para que los puertos estadounidenses se pongan al día con sus retrasos en la atención de buques y el desembarco de contenedores.
La situación en los puertos del sur de California y Oakland es tan grave como siempre y se está expandiendo hacia el norte y hacia el interior. Sin duda, muchos importadores y exportadores se replantearán el uso de los puertos del Sur de California para comenzar un proceso de diversificación portuaria. Tarea más fácil para las grandes empresas que tienen centros de distribución regionales en todo EE.UU. y mucho más difícil para las pequeñas empresas ubicadas en California.
Si bien con la celebración del Año Nuevo Chino y el arribo al país asiático de contenedores vacíos calmará la situación brevemente, Jon Monroe prevé un efecto de rebote, luego que a regreso del feriado las fábricas reanuden sus reservas para atender una demanda inagotable de los consumidores de EE.UU. que parece podría prolongarse hasta más allá del tercer trimestre de 2021.
FUENTE: MUNDO MARITIMO (CL)