Las expectativas sobre el acuerdo de primera fase que Estados Unidos y Ecuador firmaron a inicios de diciembre son altas para el sector cacaotero nacional, tomando en cuenta que se trata de un mercado natural histórico.
Este acuerdo, denominado corto, tiene solo cuatro capítulos: facilidades para el comercio internacional, buenas prácticas regulatorias, beneficios para las mipymes y lucha anticorrupción en el comercio internacional.
En tanto, Francisco Miranda, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao (Anecacao), explicó que Estados Unidos prefiere el cacao ecuatoriano por los costos logísticos y por la tradición en sus recetas. “Hemos sido siempre parte de sus generaciones”, resaltó el dirigente gremial.
Esta preferencia se refleja en las cifras de exportación. En 2019 el total exportado fue de 301.337 toneladas métricas ™, de las cuales 54.625 tm fueron exportadas a los Estados Unidos, es decir, el 18,13 % del total exportado.
Mientras, este año la participación en el mercado estadounidense creció pese a la pandemia del COVID-19. De enero a noviembre se han exportado 315.979 tm, de ese total 78.484 tm fueron exportadas a EE. UU., el 24,84 %.
Para el cierre de este 2020 se prevé que Ecuador complete las 345.000 tm exportadas a todos sus mercados internacionales.
En tanto, sobre el acuerdo de primera fase y un posible tratado comercial que se pretende firmar entre ambas naciones para el 2021, Miranda cree que les dará la apertura al sector de mejorar el valor agregado con el que pueden llegar a ese mercado, para traer inversiones en elaborados y procesamiento de granos, para llegar con estándares equivalentes de calidad al mercado norteamericano.
El presidente de Anecacao destaca que en ese mercado no tienen barreras arancelarias, pero sí parancelarias, “donde un acuerdo comercial nos puede dar la mano y darnos ese empujoncito que nos hace falta”, sostuvo.
Agregó que el cacao ecuatoriano puede crecer en el mercado norteamericano debido a una iniciativa de ese país que busca evadir productos con origen en deforestación y esclavitud.
“Esto sacaría del mercado teórico a los países africanos, y con una relación más estrecha con los Estados Unidos podemos ingresar nosotros a esa conversación como un reemplazo natural del cacao que están vendiendo de países africanos”, analizó Miranda, quien señaló que, por ejemplo, en el mercado europeo el cacao proveniente de países africanos es preferido por los costos logísticos, debido a la cercanía, por lo que lamentó que el cacao ecuatoriano tenga escasa participación allí.
Pero, de vuelta a Estados Unidos, destacó que habría ventajas para la exportación de productos con valor agregado como el chocolate.
“De ahí las oportunidades que se abren son para el chocolate, un mercado complejo para ingresar por las exigencias sanitarias, que son difíciles en Estados Unidos, y un acuerdo comercial nos permite hablar en términos más equivalentes entre las normativas ecuatorianas y las americanas para abrir las puertas de ese mercado”, expresó.
FUENTE: EL UNIVERSO (EC)