Con la sanción de la ley Colombia se consolida como referente mundial de sostenibilidad.
Con la sanción de la Ley de Transición Energética anoche, por parte del Presidente Iván Duque, Colombia no solo allana el camino para que el país atraiga mayor inversión hacia este importante renglón de la economía, sino que, además, se convierte en un referente mundial en materia de sostenibilidad e incorporación de energías renovables de fuentes no convencionales a su matriz de generación.
Y es que dicha norma reconoce el hidrógeno azul y verde como fuentes no convencionales de energía, que podrán aplicar a beneficios tributarios como la deducción del impuesto de renta, exclusión de IVA, exención de aranceles, depreciación acelerada, y reglamenta el uso de nuevas tecnologías de generación como la geotermia, indicó el Gobierno.
“Este es un hito muy importante que consolida todo el marco fiscal, comercial y regulatorio para la Transición Energética, ampliando incentivos a nuevas fuentes, además de la inclusión de temas relacionados con almacenamiento de energía, captura, almacenamiento y uso de carbono, y eficiencia energética”, dijo el Ministro de Minas y Energía, Diego Mesa.
La norma también extiende los beneficios tributarios de exclusión de IVA, aranceles y depreciación acelerada, establecidos en la Ley 1715, a los proyectos de gestión eficiente de la energía. Las inversiones y los equipos de medición inteligente contarán igualmente con estos beneficios.
Según lo indicado por el ministro de Minas, con esta iniciativa se crea Fonenergía, el cual articulará y focalizará las diferentes fuentes de recursos para financiar planes, proyectos y programas de mejora de calidad en el servicio, expansión de la cobertura energética, y se fortalecerá el Fondo de Energías no Convencionales y Gestión Eficiente de la Energía, Fenoge.
La sanción de la Ley de Transición Energética se dio en el marco de la inauguración de la granja solar El Carmelo de Celsia, en Candelaria Valle del Cauca, proyecto que cuenta con más de 33.000 paneles con una capacidad para generar 9,8 MW, equivalentes al consumo de 12.850 familias. Cada megavatio instalado evita la emisión de 640 toneladas de CO2 al año.
Este proyecto contó con una inversión de 38.000 millones de pesos, generó 182 empleos durante su etapa de construcción de los cuales un 23 por ciento fueron ocupados por mujeres que desempeñaron diferentes labores, entre ellas, el montaje de módulos y la instalación de los tornillos y arandelas para el amarre de estructuras.
Durante la inauguración de este proyecto, el Presidente Iván Duque, indicó que Colombia fue aceptado como miembro de la Agencia Internacional de Energía. Esto se dio como «un reconocimiento al país por ser líder de transición energética en América Latina y el Caribe”, precisó el Mandatario.
FUENTE: EL TIEMPO (CO)