Condimentos, postres y comida rápida, entre los productos de mayor consumo pospandemia en Ecuador

En marzo pasado Andrea Garzón se preocupó por comprar vitamina C, frutas, vegetales. Quería fortalecer el sistema inmunológico de su familia ante la presencia del COVID-19. Sin embargo, tres meses después, al pasar de la etapa del confinamiento al distanciamiento y un poco más de apertura, la alimentación cambió. Dice que fue difícil controlar esas ganas de “picar”.

“La primera semana de pandemia mi esposo me decía tenemos que comer bien y estar protegidos; desayunábamos leche, pan, jugo. Después pasamos a comer empanadas, pasteles, sánduches, cosas golosas. Y también comenzamos a consumir galletas con leche. Pedíamos pizza, alitas, pasta, pan de chocolate. El estar encerrado te da ganas de comer eso”, afirma la quiteña de 34 años y madre de dos niños.

Esa es la tendencia de consumo pospandemia de acuerdo con las cifras de las empresas de delivery (entrega a domicilio) Glovo, Uber Eats y Kantar.

Glovo registra mayores entregas de snacks, postres y otros productos tradicionales, como pollo, hamburguesas, pizzas o comida china. “Esto quiere decir que el usuario prefiere adquirir productos que mejoren su ánimo. Hay una inclinación por comer algo rico, más que saludable”, indica Daniel Arévalo, gerente general de Glovo Ecuador.

Este cambio en el hábito de consumo de los usuarios del servicio de delivery muestra la inclinación por la llamada comfort food (comida confortable).

Uber Eats dice que también los helados han tenido mayor demanda en las últimas semanas y así lo corrobora el guayaquileño Giovanni Burgos, de 31 años. Dice que, en ocasiones, en su hogar se consumen donas y helados. “Los niños me piden que compre helados de litro para comer mientras ven televisión. Antes se lo hacía cuando uno iba a pasear, pero ahora no se puede”, asegura.

En la plataforma Uber Eats las categorías más buscadas son filetes de carne, papas fritas, pizza y hamburguesa.

Édgar Salas, director de Innovación de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES), dice que otros productos en mayor consumo son los cubos sazonadores, gaseosas y de higiene.

Cita al estudio de Kantar Food Print, que hace un análisis del consumo en Latinoamérica. Respecto de Ecuador, en la categoría alimentos prevalecen los cubos sazonadores y el atún enlatado; en bebidas, gaseosas y café; en lácteos, leche y bajó el consumo de yogur; y en cuidado personal se mantiene el detergente. Salas cree que el yogur disminuyó por cuestiones de precio.

Menciona que en esta situación la elección va ligada al costo. “Es más barato comprarse un arroz con menestra y pollo frito a $2,15 que una ensalada César a $4,50, entonces siguiendo esa premisa la comida sana es más costosa que la que no tiene todos los nutrientes”, expresa.

Almacenes Tía registra el 38,5 % de adquisición en productos de lavado de ropa, 32,9 % en condimentos, 30,4 % en aceites, 29,3 % en jabones, 29,2 % en pescado en conservas, 29 % endulzantes, 28,1 % en galletas de dulce. Además, señala que la presencia de clientes aumentó el 20 % luego del paso al semáforo amarillo en Guayaquil.

“Durante el confinamiento hubo una para de los consumos que tradicionalmente se venían haciendo y que ahora con los cambios de semáforo hemos vuelto a la nueva normalidad”, dice Salas.

Con esto concuerda Jheovany Mejía, director ejecutivo de Eureknow, empresa de investigación de mercados y estudios del consumidor, quien menciona que se opta por combos o productos con mayor rendimiento.

“El consumidor comienza a buscar promociones, productos en descuento de tal manera que el presupuesto con el que cuenta lo pueda estirar lo más posible. (…) Y compra los productos más baratos y que sean de primera necesidad, como harinas, arroz, granos secos. No se compra tanto enlatados porque el presupuesto ha caído”, menciona.

Katherine Guerra, vocera nutricionista de Siluet y Bonna Vit, considera que sí hay un grupo de personas que mantiene el cuidado de su alimentación y se inclina por productos con nutrientes, aunque las cifras no lo demuestren.

“Es innegable que el factor económico determina al escoger ciertos alimentos, los carbohidratos por lo general son más asequibles y económicos, y tendemos a mezclar dos tipos de estos en un solo plato, olvidándonos del aporte de frutas y vegetales variados. A pesar de eso, considero que sí hay mayor concientización en la población acerca de cuidar nuestra alimentación para evitar la hipertensión, diabetes, entre otros”, expresa.

Según un estudio de Eureknow, el 49 % prefiere realizar compras digitales por ahorrar tiempo y seguridad; el 39% opta por el método presencial y el 20% no tiene acceso a compras online.

Gasto y percepción

$200 máximo de consumo

El 40,3 % de 497 personas consultadas, a través de redes sociales y correo electrónico, indicó que el gasto promedio es entre $101 y $200 por quince días. El 29,5 %, entre $201 y $400. Mientras que 21,2 % hasta $100, el 6,4% de $401 a $800 y el 2% prefirió no responder, de acuerdo a la encuesta de Oikonomics de junio. Así también el mayor consumo es en supermercados con el 61,5 %; tiendas del barrio, 29,3 %; servicio de delivery, 6,3 % y el 2,9 % prefiere acudir a los mercados municipales.

Cambios en dos vías

David Gutiérrez, consultor sénior de Oikonomics, dice que los cambios en el padrón de consumo van dos por vías: frecuencia de compras de productos de la canasta básica y de limpieza, y preferencia de compras de adquisición y calidad menores.

“Si antes esos productos se compraban una vez al mes, ahora se lo está realizando dos o tres veces en el mismo periodo. Y sobre lo otro, posiblemente están comprando la misma canasta de productos, pero hay una sustitución de marcas ligada a buscar precios menores”, indica.

Actitudes en compras

Un estudio de Eureknow analiza las barreras y motivaciones frente a las compras online. Como parte de las barreras, el 33 % cree que las compras online no son seguras, el 29 % no confía en las compras online porque no las puede ver y tocar; y el 28 % piensa que son caras. Mientras, en la parte de motivación, el 37 % prefiere las compras vía digital; al 28 % le parece cómodo y el 27 % lo hace por seguridad.

Periodicidad

Almacenes Tía menciona que antes de la pandemia llevaban en promedio 7,48 productos por fact aura. Durante el confinamiento fue de 13,64 productos por cliente; y actualmente se ha estabilizado a 9,50 por factura. La forma de pago más utilizada ha sido el efectivo con 78,19 %, crédito 9,25 % y débito 8,23 %. (I)

FUENTE: EL UNIVERSO

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