Tras 78 días de cuarentena por la presencia del coronavirus, unos 400 000 empleados del sector privado podrían volver desde hoy a sus actividades en Quito. El sector público, unas 140 000 personas, seguirá en teletrabajo hasta el 15 de junio.
La Cámara de Comercio de Quito (CCQ) emitió un manual denominado Reactivación Productiva responsable, en el que se explica que se debe priorizar el teletrabajo, que hay un aforo comercial del 30 % en restaurantes, que haya distancia entre personas de dos metros, que el toque de queda va de 21:00 a 05:00, que los vehículos particulares pueden circular tres veces por semana.
Centros de tolerancia, bares, discotecas, cantinas, karaokes, galleras, salas de recepciones, billares, eventos públicos, masivos y deportivos al aire libre, juegos electromecánicos, canchas deportivas no pueden funcionar todavía.
Las empresas se han ido adaptando a la nueva realidad. Ricardo Rosales, director general de KIA Motors del Ecuador, expresó que, por ejemplo, cuando el dueño de un vehículo va a hacer el mantenimiento en talleres puede esperar en zonas especiales, las cuales respetan el distanciamiento evitando cercanías. También se han adaptado a que las revisiones sean menores para tener el 30 % de aforo y hay sistemas de desinfección.
A juicio de Juan Carrión, edil capitalino, Quito no está preparado para el semáforo amarillo y existe falencia en unidades de atención médicas.
“Tenemos en Pichincha, y no debo desconocer eso como un repunte de estos indicadores (atenciones de enfermedades respiratorias en emergencia, defunciones, llamadas al 171) en la última semana, las consecuencias de estos nuevos contagios porque la gente sale, no guarda las distancias, va a verse a finales o a mediados de junio, veremos nosotros un rebrote. El mensaje para la ciudadanía es que nosotros estamos preparados”, señaló el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, en una entrevista.
El alcalde de Quito, Jorge Yunda, una vez que conoció la resolución del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional del cambio de semáforo, en un video sostuvo que en el color amarillo la responsabilidad del cuidado ahora es del quiteño. “Tenemos que aprender a cuidarnos y a salir, y nosotros como autoridades a mitigar esos riesgos para que la ciudadanía no se contagie. Sin embargo, veremos en quince días cuál es el nivel de contagiados y a lo mejor el mismo COE nacional, nosotros estaremos pendientes y, a lo mejor, Dios no quiera, pero a lo mejor, toque nuevamente tomar medidas radicales”, dijo.
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