Cada 30 segundos un latino cumple 18 años y alcanza la edad para sufragar en las elecciones de la primera potencia mundial; eso es el equivalente a 800.000 votantes al año. Actualmente suman más de 60,6 millones.
El más reciente estudio publicado por el Centro de Investigaciones Pew (Pew Research Center), con sede en Washington DC, concluyó que en 2019 el número de hispanos en Estados Unidos alcanzó un récord de 60,6 millones, lo que representa el 18% de la población del país, y es más que los 50,7 millones registrados en 2010, cuando los hispanos eran el 16% de la población.
No es de extrañar, entonces, que tales números revelen la importancia de la comunidad hispana en los comicios electorales de Estados Unidos, cuando faltan pocos meses para las elecciones presidenciales de noviembre.
“Sobre la cuestión del impacto del voto latino tenemos que pensar en la tasa de votación, cuántos latinos son elegibles para votar. Históricamente más o menos la mitad de los que son elegibles para votar lo hacen en las elecciones presidenciales, y es un porcentaje más bajo que los blancos y afroamericanos”, explicó Jens Manuel Krogstad, del Centro de Investigación Pew y uno de los editores del estudio.
Pero Krogstad añadió que el aumento en las cifras puede tener siempre un alto impacto en las elecciones, sobre todo en estados donde históricamente hay una alta incidencia de hispanos.
“Siempre hay la posibilidad de un gran impacto en estados como Florida y Arizona pero también es importante tomar en cuenta que hablamos de dos poblaciones diferentes, aunque hablamos de una población hispana o latina”, dijo el investigador, refiriéndose específicamente a las edades para votar.
“En Florida, por ejemplo, vemos que la edad media para latinos es 36 años y es la edad media más alta de todo el país. Pero en Arizona la edad media es 28 años así que es mucho más baja, es decir hay más jóvenes en ese estado, y la gente de menor edad tiende a votar menos que los de mayor edad; y eso es algo que pasa con todas las poblaciones, blanca, afroestadounidense o hispana”, agregó el investigador.
Pero esto puede cambiar rápidamente, según datos publicados por el mismo Pew Research Center; cada 30 segundos, un latino cumple 18 años, alcanzado la edad para poder sufragar, eso es un equivalente a 800.000 votantes al año, una cifra que atrae a cualquier político.
Al respecto, Roberto López, vicepresidente de la Cámara de Comercio Salvadoreño Americana, dijo a la Voz de América que la importancia del voto latino demuestra ser determinante y es la razón por la que los contendientes en las elecciones buscan ganar su confianza.
“Si vemos el área del Norte de Virginia, por ejemplo, encontramos que hay funcionarios de origen hispano en los concejos de las ciudades y en otros niveles, porque el votante latino es numeroso, es participativo y podría definir el futuro de un candidato no solo para las próximas elecciones de noviembre, sino para las que vienen a futuro”, dijo el economista a la VOA.
Diego Area, director asociado del Atlantic Council, aseguró que este estudio ratifica la tendencia de crecimiento de hispanos en Norteamérica, y el hecho de que en pocos años podría convertirse en el 30% de la población.
DATOS
1,9% en promedio creció la población hispana en Estados Unidos entre 2015 y 2019, según una investigación del centro Pew.
319.500 es el número de latinos en Nueva York. En Pennsylvania sumaron 273.900, mientras que en Rhode Island llegaron a 40.600.
47,6 % de los latinos que podían votar lo hicieron en las elecciones de 2016. Una cifra baja, según el centro Pew.
Estudiantes extranjeros sienten alivio
Los estudiantes y educadores expresaron alivio después de que el Gobierno de Estados Unidos retiró una disposición que requería que los estudiantes internacionales estuvieran en el campus este otoño o corrieran el riesgo de perder su visa.
Desde la semana pasada, los estudiantes y los educadores han estado inmersos en la confusión y la ansiedad, dijeron, por la incertidumbre de si se les permitiría asistir a sus clases en línea en lugar de presencial.
Desde marzo, muchos colegios y universidades cerraron sus campus y cambiaron a clases en línea para impedir la propagación del covid-19.
“Esta es una victoria significativa. La disposición interrumpió toda la educación superior estadounidense”, escribió el presidente de la Universidad de Harvard, Lawrence Bacow, en un correo electrónico a la comunidad de Harvard.
Harvard y el Instituto de Tecnología de Massachusetts habían presentado una demanda contra el Departamento de Seguridad Nacional y las agencias de Inmigración y Control de Aduanas, que publicaron la directiva de que los estudiantes internacionales tenían que asistir a clases de otoño en persona, y no solo en línea, o perderían su visa y tendrían riesgo de deportación.
“Estoy bastante aliviado en este momento porque tengo algún tipo de claridad sobre el futuro previsible”, dijo Jaskirat Panjrath, estudiante de primer año en la Escuela de Diseño de Parsons en Nueva York. (I)
Fuente:Diario El Telegrafo.