“Sabemos que es un impuesto malo, malísimo, que va en contra de lo que queremos fomentar […] pero les tengo que pedir que entiendan que es una emergencia y necesitamos de su aporte”. Este fue el mensaje que Mauricio Macri, presidente de Argentina, dirigió hacia los empresarios de su país el lunes, pues su gobierno contempla que estos paguen un nuevo impuesto generalizado y “transitorio” por los bienes y servicios que exporten. Nicolás Dujovne, ministro de Hacienda, explicó que se aplicará un impuesto de cuatro pesos por dólar a los bienes primarios y servicios, y tres pesos por dólar al resto de bienes vendidos al exterior hasta diciembre del 2020.
Esta es una de las medidas que adoptará Argentina para lograr el equilibrio fiscal y cumplir con su nueva meta de déficit primario cero al 2019 (el actual asciende a 2,6% del PBI). Dujovne señaló que el incremento de los derechos de exportación implicarán una recaudación adicional de cerca de US$7.000 millones el próximo año; 1,1 puntos porcentuales menos en el déficit fiscal de este período.
Además de incrementar los ingresos, la gestión de Macri también buscará contraer las inversiones públicas, congelar los salarios de funcionarios estatales, reducir los gastos corrientes y recortar los subsidios en electricidad y transporte trasladándolos a las provincias.
LAS MEDIDAS PRESENTADAS POR EL GOBIERNO ARGENTINO:
Silvana Huanqui, profesora de la escuela de Gestión Pública de la Universidad del Pacífico, apunta que las medidas generarán necesariamente una recesión y, en esa línea, tendrán impacto socialmente negativo. No obstante, señala que la recuperación a la que apunta Argentina es “sana, pero gradual”.
«La eliminación de ministerios que acaba de implementarse es analógicamente similar a un hogar que vive sobreendeudado […], se ven perjudicados todos los miembros de la familia al tener que recortar fuertemente sus gastos; algunos de ellos son necesarios, pero se busca atender únicamente lo urgente. Las medidas de Macri son claramente de corto o mediano plazo, porque muchos de estos sectores son claves para el desarrollo económico de largo plazo de un país», indica.
Por su parte, Gabriel Holand, director de HR Global Consultores Financieros, considera que las medidas planteadas «son un parche» ante la situación por la cual viene pasando el país. Aunque estas sí cumplirían con el objetivo de generar un aumento en la caja fiscal, el experto menciona que no suman a la necesidad de elevar el grado de confianza sobre dicha economía.
«Empezaría por que el problema aquí no es económico. Es político. Cualquier medida que se implemente necesita cierto grado de acuerdo de las fuerzas parlamentarias, y eso no ha empezado ni hay signos de que se vaya a concretar», comenta.
Por ejemplo, uno de los debates políticos que se aproximan es sobre la ley de presupuesto de Argentina para el 2019. Para Holand, que se logre un acuerdo en el mismo —que, además, incluye recortes— mandaría una buena señal a nivel internacional.
LA DEBACLE DEL PESO
Para Huanqui, las medidas anunciadas pueden cumplir con el objetivo de calmar a los mercados, en un contexto en el que el peso argentino continúa cayendo frente al dólar y ya acumula una depreciación de casi un 50%.
Huanqui agrega que las medidas deben ser acompañadas por “una continuidad en las metas planteadas de reducción del déficit y de la deuda en los siguientes meses”.
“Bien dicen que la crisis argentina es una crisis de confianza. […] Las políticas anunciadas por Macri debieron aplicarse al inicio de su mandato”, asevera.
LA CONFIANZA
Un reporte de la agencia calificadora S&P Ratings remarca que las acciones que tome la administración de Macri deberán ayudar a sostener la confianza de los inversores y mantener el acceso del gobierno a los mercados de capital para fondear su gran déficit fiscal. Además puso la calificación de la deuda soberana argentina bajo revisión especial con implicancias negativas.
Hasta ayer, que el peso volvió a caer en los mercados, Dujovne pidió paciencia ante el contexto actual de la moneda, y precisó que el impacto de las medidas anunciadas “va a tardar en verse en los indicadores financieros”.
FUENTE: DIARIO EL COMERCIO (PE)