Ricardo Monteros Tello, fundador y director de la Orquesta Ecuador Sinfónico, destaca el esfuerzo de profesores y estudiantes en un inédito aprendizaje virtual por el coronavirus.
La Orquesta Ecuador Sinfónico (OES), a pesar de este distanciamiento social que estamos viviendo, ha procurado no desatender sus obligaciones con los estudiantes. Es así que su director y sus profesores han puesto en práctica el único recurso posible: el de la creatividad.
El director Ricardo Monteros Tello fue el fundador de esta agrupación musical sui géneris, formada por niños y jóvenes de varias nacionalidades, nacida en Quito (2017) y que hoy entre músicos y cantantes del coro agrupa a unos 70 integrantes comandados por un equipo de seis profesores.
Monteros, entrevistado por EL TELÉGRAFO, se refirió a esta nueva situación y afirmó que “los profesores siguen haciendo ensayos de manera virtual, dando tareas, haciendo trabajos técnicos y podemos decir que aunque no nos hemos visto personalmente la OES, en buena hora, no se ha detenido”.
Resulta complejo realizar un ensamble virtual: “Los profesores estamos también siendo muy creativos buscando el material, los directores están haciendo las bases de los acompañamientos, diciendo a cada chico lo que tiene que hacer, las aplicaciones que deben usar viendo el repertorio, ayudándoles con las técnicas”.
El director refiere que no hay cómo hacer algunas cosas y que el ensamble de una orquesta es muy complejo sin el director, “los tiempos reales no se sincronizan, pero con una base armónica definiendo los tiempos se ha asumido bastante bien, no es lo óptimo pero no hemos querido detenernos”.
La respuesta ante el cambio ha sido muy positiva: “Primero la situación nos llevó a echar mano, preparados o no, de la herramienta informática, de las plataformas, en momentos en que nos tuvimos que volcar en la educación en línea, sin una preparación ni una inducción para esto”.
Así, “abocados a aprender sobre la marcha”, comenta Monteros que los chicos ya se han familiarizado con las plataformas y esto ha ayudado a que, ante la saturación de tareas escolares, se hayan acercado a sus instrumentos. “Hacer música ha sido muy favorable para descongestionarse de esta enorme carga con un momento de disfrute, además con la complicidad de sus padres”.
Un ejemplo fue el concierto de la Misa Brevis, de Arthur Dieriecx, un compositor flamenco del siglo XIX, que querían estrenarlo en el marco de la Semana Santa, pero ante la emergencia sanitaria que decretó la suspensión de los espectáculos públicos la presentaron de manera virtual (https://www.youtube.com/watch?v=O1uiwGsoXVU) y llegaron así a miles de personas en todo Ecuador.
En estos momentos la agrupación está montando algunas obras del repertorio ecuatoriano como Mi lindo Ecuador “con uno de los vocalistas originales del grupo Pueblo Nuevo, con mi padre José María Monteros estamos en eso y también estamos haciendo un mix de Queen Sinfónico con la Orquesta Infanto-Juvenil de Guaranda”.
El trabajo con la agrupación de la provincia Bolívar se hace con la dirección del maestro Kléver Gallegos.
“Cada uno de los chicos desde sus hogares graba sus partes y estudia sus repertorios, no se ha detenido el trabajo, ha cambiado la modalidad pero el trabajo sigue”, añade Monteros.
El Maestro ratifica que las puertas de la OES siguen abiertas para todos: “Hoy estamos trabajando con Ecuador y Venezuela, pero hemos tenido chicos de México, Cuba y de Colombia; en este momento tenemos bastantes chicos y maestros de Venezuela, así como de varias provincias de Ecuador”.
Consideramos que en estos instantes tan complejos de la humanidad “el arte no puede descansar, no se puede detener bajo ningún concepto. Podemos estar con la salud física mal, pero necesitamos alimentar nuestro espíritu de alguna manera y el arte cumple con una labor primordial en sostener nuestro espíritu y seguir adelante”.
Acerca de la situación por el covid-19, Monteros opina que “debemos valorar el espacio entre familia y con los amigos, seguir con las actividades en la medida de las posibilidades, quedarnos en casa, haciéndolo responsablemente, pero no estar esperanzados en que el Estado como autoridad nos da la vida”.
El Director de la OES aconseja “tomar nuestra responsabilidad como ciudadanos e integrantes de una aldea común, ser responsables con nuestros actos y contribuir con la sociedad de alguna manera y no estar en esas discusiones que se ven en las redes sociales con mucha crítica y tan pocas propuestas”.
“La mejor sugerencia que podemos dar en medio de esta crisis es mantenernos sanos, activos, solidarios y siempre positivos porque vamos a seguir adelante”, concluyó. (I)
Fuente: Diario el Telegrafo