El FMI busca tranquilizar en la turbulencia

La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, está consciente del impacto de la caída del precio del petróleo en la economía ecuatoriana.

Así lo dijo ayer Gerry Rice, portavoz del organismo, en una conferencia de prensa virtual que realizó el organismo como medida de seguridad ante la expansión del COVID-19.

Rice aseguró que el presidente de la República, Lenín Moreno, conversó sobre este tema con Georgieva, vía telefónica. Rice reconoció las implicaciones para Ecuador de la reciente caída brusca de los precios del crudo y los efectos del coronavirus, e indicó que el organismo continuará trabajando “estrechamente con las autoridades ecuatorianas para ayudarlas a navegar en este desafiante y cambiante entorno económico”.

No obstante, el organismo no dio detalles de un posible crédito de emergencia que el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, aseguró estar explorando para capear la crisis del coronavirus.

¿Cuál ha sido la reacción del Fondo respecto a las medidas económicas anunciadas por Moreno el martes pasado? El portavoz del FMI dijo que las miran como “pasos positivos”. Las acciones anunciadas por el Gobierno buscan tener un impacto de $ 2.225 millones, entre ahorros y nuevos ingresos.

Sin embargo, en los mercados internacionales y casa adentro las interrogantes sobre las medidas económicas se mantienen.

En su último reporte, la firma financiera Barclays señaló que las medidas anunciadas no brindan suficiente claridad sobre la capacidad de las autoridades para administrar su flujo de liquidez en medio de la caída de los precios del petróleo.

En lugar de medidas generadoras de ingresos, aseguró Barclays, el objetivo son los recortes de gastos, cuya efectividad llevará tiempo confirmar. El efecto real podría ser significativamente menor que el estimado por las autoridades, sostuvo la firma.

Mientras tanto, la Asamblea se detuvo ayer tras la declaración de la emergencia sanitaria en el país, que rige desde el pasado miércoles en la noche. Ese día el titular del Parlamento, César Litardo, anunció que se conformó una subcomisión para analizar, junto con el Ejecutivo, el proyecto de Código de Planificación y Finanzas Públicas, antes de su envío.

Ayer estaba programada una reunión con el Sistema Financiero Nacional, esto es el sector bancario y las cooperativas. Martínez detalló que el objetivo de la cita es tratar el proyecto de finanzas públicas y cuál será el aporte de este rubro en la actual crisis económica.

Pese al anuncio, el Gobierno no convocó formalmente al encuentro a los representantes de los bancos. Ayer en la mañana la Asociación de Bancos del Ecuador (Asobanca) aseguró que, hasta ese momento, únicamente habían tenido conocimiento de una posible convocatoria de reunión con el ministro Martínez y la Asamblea por las declaraciones públicas de las autoridades.

“No hemos recibido aún ninguna convocatoria oficial, de modo que no conocemos los detalles específicos”, mencionó un vocero de Asobanca. Por otro lado, según la asociación, el presidente ejecutivo de Asobanca, Julio José Prado, ayer se encontraba fuera del país, atendiendo compromisos previamente adquiridos.

Diversos sectores económicos se siguen pronunciando tras evaluar el impacto de las medidas en sus negocios.

Por ejemplo, los dueños de las concesionarias de autos señalaron ayer que obligar a los propietarios de vehículos valorados en más de $ 20.000 a cancelar un impuesto único del 5 % generará un nuevo freno en sus ventas.

La Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade) lo califica como una medida “cortoplacista e improvisada”, que no solo desalentará la demanda y las ventas, sino que afectará la recaudación tributaria. “En lugar de recaudar los 220 millones anunciados por el Gobierno, esto reduciría 75 millones en ingresos fiscales”, dijo Genaro Baldeón, presidente del gremio, a través de un comunicado de prensa.

Según cifras de la Aeade, entre enero de 2018 y febrero de 2020 se vendieron 176.000 vehículos con un valor superior a los $ 20.000, el 60 % de un total de 289.447 automotores comercializados.“Si se excluyera el 36 % de vehículos que corresponden a camiones, buses, taxis y furgonetas (para los que se cree no aplicará la medida), los que pagarían efectivamente este tributo son 110.000 unidades, con una recaudación potencial máxima de 165 millones de dólares, y no los 220 millones anunciados por el Gobierno”, señaló el dirigente empresarial.

La medida deberá ser aprobada por la Asamblea. Sin embargo, hasta el momento algunos representantes de bancadas ya han expresado su negativa a apoyarla, alegando un perjuicio para la clase media.

La Federación Nacional de Cámaras de Comercio del Ecuador (Fedecámaras) señaló que el Gobierno mejorará su flujo quitando liquidez del sector productivo. Criticó el incremento de 0,75 % en las retenciones en la fuente del Impuesto a la Renta. La medida implicará una menor liquidez para el sector productivo en un año recesivo, aseguró la federación.

Concurso para focalización de subsidios, en 15 días

El ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, dio entrevistas ayer para explicar las medidas y la situación económica del país.

En Radio Visión, Martínez dio nuevos detalles sobre la focalización de subsidios a los combustibles, medida que ha sido calificada como idónea en estos momentos de precios bajos del petróleo por el Gobierno.

Sin embargo, el titular de esa cartera de Estado sostuvo que al momento no ve condiciones políticas para focalizar los subsidios.

Martínez explicó que si el Gobierno libera el precio de los combustibles en este momento, la gasolina costaría menos de lo que cuesta actualmente en las estaciones de servicio del país.

El titular de Economía y Finanzas sostuvo que vienen trabajando con 50 organizaciones de la sociedad civil, como artesanos, servidores públicos, trabajadores, entre otros, para definir la focalización de los subsidios.

En esas mesas de diálogo se ha conversado qué tipo de sistema se utilizará para conseguir el objetivo.

En 15 días, dijo Martínez, se convocará a un proceso de contratación para el sistema que se instalará en todas las gasolineras del país.

Dicho sistema puede funcionar a través del número de cédula, reconocimiento facial o un ‘sticker’ o placa que se colocará en los automóviles, explicó el ministro. El precio de las gasolinas sería diferenciado, según los ingresos de cada persona.

 

FUENTE: DIARIO EL EXPRESO (EC)

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