El Comité de Deuda y Financiamiento autorizó la emisión de bonos internos por $ 1.936 millones para solventar programas y proyectos de 2019 y 2020. Con el fin de renovar títulos pertenecientes a entidades públicas y privadas que están próximos a vencerse, el Gobierno Nacional realizó una nueva emisión de deuda interna por $ 1.936 millones.
El Comité de Deuda y Financiamiento resolvió autorizar la emisión que fue notificada a las Bolsas de Valores de Guayaquil (BVG) y de Quito (BVQ), el jueves 28 de noviembre.
Este mecanismo es una estrategia normal que se realiza cuando una nación tiene necesidad de financiamiento, según explicó el rector del Instituto Argos, Jorge Calderón. “Puede adquirir un préstamo o emitir bonos internos o externos”.
En la actualidad, debido al riesgo país que está por encima de los 1.200 puntos, las tasas de interés en los mercados externos podrían pasar del 12%. Razón por la cual el Estado emite bonos internos con tasas que pueden ser del 8% al 10%.
Debido a que el vencimiento de bonos del mercado interno ya está cerca, el Estado busca renovar esa deuda y así lograr que lo esperen dos o tres años para pagar el capital y a cambio seguir cancelando intereses, explicó Calderón.
Para Gonzalo Cucalón, gerente general de Casa de Valores Banrio, es normal que el Ministerio de Economía y Finanzas busque mantener su capacidad de emitir endeudamiento interno. “Ellos conocen bien la capacidad del mercado interno de invertir en bonos del Estado y lo hacen para satisfacer la demanda interna”, afirmó.
Finanzas explicó que los recursos financiarán parcialmente el “Programa de Preservación de Capital Periodo Plurianual” y otros proyectos de inversión para este y el próximo año 2020. Las colocaciones se harán principalmente en función de los vencimientos de inversiones pertenecientes a entidades públicas y privadas.
El catedrático Santiago García explicó que la práctica de emitir bonos y transaccionarlos en el mercado de valores se la viene realizando desde hace mucho tiempo, para solventar problemas de liquidez. “Me parece razonable, dado que el mercado internacional está cerrado y con tasas de 14% de castigo, es inmanejable colocar bonos internacionales”, aseguró García.
Para Verónica Artola, gerenta del Banco Central del Ecuador, la emisión es totalmente transparente para cumplir temas que están venciéndose el próximo año. “Hay operaciones con el Biess, Gobiernos Autónomos Descentralizados, o Bonos 2020 que se necesitan refinanciar”.
Por su naturaleza, las entidades tenedoras de títulos -como la seguridad social- demandan la renovación de su inversión llegado el vencimiento, indica Finanzas. Larry Yumibanda, presidente del Colegio de Economistas del Guayas, teme que el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) sea la entidad que compre este tipo de documentos.
Al igual que Calderón, cree que los recursos de esta entidad deben ser invertidos en otorgar más préstamos a sus afiliados o a su vez a proyectos de infraestructura o de inversión en sectores estratégicos, como la minería. La práctica del IESS de comprar bonos internos fue común en el gobierno de Rafael Correa, que llevó a problemas de liquidez a la institución. (I)
FUENTE: DIARIO EL TELEGRAFO (EC)