Donald Trump cumple de a poco su promesa de «Estados Unidos primero» con la imposición y la amenaza de nuevos aranceles, pero ¿cuáles ha anunciado hasta ahora? y ¿será afectado Ecuador?
Este 12 de marzo de 2025 empezaron a regir los nuevos aranceles en Estados Unidos a las importaciones de acero y aluminio, que forma parte de un listado de impuestos que el presidente Donald Trump ha anunciado o implementado, en un intento de revitalizar la industria de su país y presionar a otros países a cambiar sus políticas.
Los aranceles a las importaciones de los mencionados metales es la de mayor alcance, uno de carácter global, pues incluye a todos los países desde los que Estados Unidos compra estos recursos vitales para la industria automotriz estadounidense.
¿Será Ecuador afectado por los aranceles?
Ecuador, si bien con una participación menor en este apartado, es una de las economías que se verá afectada por la imposición de estos impuestos a los productos de acero y aluminio que lleguen a Estados Unidos.
Ejecutivos de la industria consideran que serán los exportadores ecuatorianos quienes tendrán un escenario más desafiante, al tener que competir con los precios de los productores de otros países donde los costos son menores.
Esto podría provocar que los metales de esas otras economías (sobre todo asiáticas) sean opciones más atractivas para los consumidores estadounidenses.
Aranceles a China
China es el país con el que más han crecido las tensiones con Trump. Según el magnate conservador, sobre el gigante asiático pesa una gran responsabilidad por la crisis del fentanilo que se vive en Estados Unidos, razón por la que asegura ha adoptado aranceles en contra de Pekín.
Contra China, Trump colocó un arancel inicial del 10% a los productos chinos, que después subió al 20% en marzo.
Ante esto, el gobierno de Xi Jinping ha respondido con varios aranceles de represalia a Washington:
Impuestos del 15% al carbón y gas natural licuado, pollo, trigo y maíz.
Tributos del 10% al crudo, maquinaría agrícola, camionetas, soya, cerdo, carne vacuna y fruta.
Pero, tras la reciente imposición de las tarifas al acero y aluminio a nivel global, los aranceles desde Estados Unidos a los productos llegan al 45%.
Tarifas a Canadá y México
El mismo argumento sobre el fentanilo ha usado Estados Unidos para causar presión comercial a Canadá y México, a quienes ha prometido imponer aranceles del 25% a sus productos, aunque la medida se ha retrasado en varias ocasiones.
Un impuesto similar a las importaciones provenientes de Colombia quiso imponer Trump en enero de 2025, después que el presidente colombiano Gustavo Petro rechazó recibir un avión con deportados del país sudamericano en condiciones que Bogotá rechazaba.
La disputa comercial entre ambas economías no progresó y sus gobiernos lograron llegar a acuerdos respecto al traslado de los migrantes deportados, que fueron vistos sin esposas en las fotografías divulgadas por Petro.
El 13 de febrero, la administración de Trump anunció un plan con el que promete buscar la restauración de un «trato justo en las relaciones comerciales de Estados Unidos». Es decir, cambiar las condiciones en las que Washington negocia con otras naciones para «contrarrestar acuerdo comerciales no recíprocos».
¿Impacto global?
El alcance final de las políticas de Trump no es claro, aunque en el memorándum de febrero aseguró que son 132 países los que cuentan con una presión tarifaria mayor a los productos estadounidenses, que la que el país norteamericano impone a estas economías.
Tampoco hay seguridad en que las promesas del republicano se cumplan sin problema pues existen antecedentes de anuncios de imposición de aranceles que finalmente no se cumplieron, o han quedado en el aire.
Un ejemplo reciente de esto es el anuncio de impuestos del 50% las importaciones de acero y aluminio canadienses, en respuesta a las intenciones de la provincia de Ontario que había anunciado que impondría aranceles del 25% a las exportaciones de electricidad a Estados Unidos. Trump retrocedió en esta medida.
A finales de febrero, Trump había dicho que «pronto» se anunciarían aranceles del 25% a productos de la Unión Europea, enfocados principalmente en autos aunque también en «todas las otras cosas», en palabras del republicano.
Crecimiento de temores
Si bien hasta el momento es una lista selecta de países que se ven afectados de manera considerable por los aranceles, el hecho que Estados Unidos mantenga vigente las tarifas a las importaciones provenientes de China, y que Pekín haya respondido a estas medidas, encarece las cadenas de valor del comercio global, además de aumentar las probabilidades de un incremento en la inflación en el país norteamericano.
Esto, a su vez, ha generado temores por una posible recesión en Estados Unidos, lo que implicaría que su población tendría menos capacidad para comprar productos importados, algunos de ellos a un precio mayor al habitual.
Parte de estos temores se han visto reflejado en los desempeños de los mercados bursátiles en Nueva York y en otras ciudades y países del mundo, que en días y semanas recientes han registrado pérdidas.
Fuente: Primicias EC