Los objetivos de Glovo para 2019 son doblar el número de establecimientos en su plataforma hasta los 20.000

Glovo desafía a los gigantes de la distribución. La start up española ha abierto en Madrid su primer espacio físico, un almacén con 1.000 referencias, entre los que se encuentran productos frescos como frutas y verduras, para competir con gigantes como Amazon, Mercadona, Carrefour o El Corte Inglés. También con pequeñas plataformas como Ulabox o Lola Market, aunque estas no disponen de negocio físico.

“Vemos una gran oportunidad en este mercado, la penetración de los supermercados online en España es muy baja, de alrededor de un 1%. En otros países como Reino Unido supera el 5%.

Nuestro objetivo es servir pedidos cada vez más grandes e incluso poder llegar a entregar su compra mensual al usuario”, ha explicado Oscar Pierre, consejero delegado de Glovo, durante un encuentro con periodistas.

Glovo prevé abrir otros tres o cuatro almacenes en Madrid para servir a toda la ciudad en 20 minutos.

El supermercado, ubicado en el barrio de Tetuán, no está abierto al público y sólo acepta encargos de clientes a través de la aplicación. Desde aquí, la compañía sirve los pedidos de su nuevo servicio SuperGlovo, con el que busca surtir de productos de conveniencia a sus usuarios.

El hielo, por ejemplo, es uno de los productos más demandados. Pierre ha avanzado que entre sus planes está abrir otros tres o cuatro almacenes en Madridpara poder dar servicio a toda la ciudad en un plazo máximo de 20 minutos. Actualmente, el tiempo de espera ronda los 30 minutos.

Glovo ya puso en marcha hace un año el servicio SuperGlovo en Barcelona en alianza con los supermercados Miquel. Además de en Madrid, la start up tiene previsto la apertura de otros dos o tres espacios propios en Barcelona y algunos más en Lima (Perú), Santiago de Chile y

Buenos Aires (Argentina).

Detrás de este nuevo servicio está el intento de la compañía por diversificar sus fuentes de ingresos en un momento de enorme competencia en el negocio del delivery de comida, donde compite con Uber Eats, Deliveroo o Just Eat. Su dependencia de este segmento es total: representa alrededor de un 80% de sus ingresos en España, su mercado principal y de donde proceden un tercio de sus ventas. Además, se suma a otras iniciativas como Glovo Business, que presta servicios de paquetería a empresas y que ya cuenta con clientes como Cabify Prink.

NEGOCIO
Glovo cerró 2017 con unos ingresos globales de 17 millones de euros, una cantidad que la compañía prevé multiplicar por cinco este ejercicio hasta los 80 millones, según ha anticipado su consejero delegado. Se trata de una cifra por debajo de los entre 90 y 100 millones previstos por la start up a principios de año debido, según ha explicado Pierre, a la estacionalidad. “Hemos aprendido que somos un servicio que se pide mucho más cuando hace frío.

Los meses de junio, julio y agosto estuvieron por debajo de nuestras previsiones”. La compañía se encuentra inmersa en una fase de expansión, tras haber cerrado una megarronda de financiación de 115 millones de euros en julio, con fuertes inversiones para abrir nuevos mercados y ciudades.

“En los últimos meses hemos lanzado, de media, una ciudad cada cuatro días”, ha reconocido el emprendedor catalán. Una serie de inversiones que explican los números rojos de 9 millones de euros en todo el mundo, 5,4 millones en España, con los que cerró la compañía el ejercicio pasado.

Los objetivos de Glovo para 2019 son doblar el número de establecimientos en su plataforma hasta los 20.000, multiplicar por tres su número de pedidos y extender sus operaciones a 10 nuevos países, principalmente de África y Europa del Este. Actualmente, la compañía está presente en 75 ciudades de 20 mercados.

FUENTE: DIARIO LA REPÚBLICA (CO)