La Habana – El Gobierno de Cuba flexibilizó una serie de reglas para el embrionario sector privado, luego de que empresarios y economistas del país criticaron enérgicamente las medidas originales, divulgó el miércoles la Gaceta Oficial.
Las medidas eliminan la regulación que limita el número de asientos en los restaurantes privados (paladares) a 50 y además permitirán que los empresarios posean más de una licencia para realizar una actividad específica. Antes, el Gobierno había restringido a una licencia por persona cada actividad.
Las nuevas normas entrarán en vigor este viernes, según la resolución publicada en el sitio web de la Gaceta Oficial (www.gacetaoficial.cu).
«Durante estos intercambios con trabajadores por cuenta propia, especialistas y funcionarios se obtuvieron criterios (…) que han sido evaluados rigurosamente (…)», dijo la ministra de Trabajo, Margarita González, en el programa televisivo Mesa Redonda.
González dijo que «como resultado se decidió aprobar la modificación de algunos aspectos
aprobados inicialmente».
Las regulaciones, que fueron publicadas originalmente en julio, buscan frenar la evasión de
impuestos y «obedecen a desviaciones presentadas y casos en los que habían dueños con muchos
negocios, signo de concentración de riqueza que no se permitirá en Cuba», según el Gobierno.
Las autoridades manifestaron también preocupaciones sobre la creciente desigualdad en la
concentración de la propiedad y la comercialización de productos en el mercado negro en medio de
las reformas de mercado en la isla.
La viceministra de Finanzas y Precios de Cuba, Meisi Bolaños, aclaró que los trabajadores que
rentan viviendas, ofrecen servicios gastronómicos y de construcción, entre otros, están
«obligados a abrir y operar» una cuenta bancaria fiscal y su incumplimiento es una infracción
sancionable conforme a la ley.
Actualmente están disponibles 123 oficios para ejercer el «cuentapropismo». La cifra de cubanos
en el autoempleo casi se ha cuadruplicado llegando a unos 592.000 personas, cerca del 13 por
ciento de la fuerza laboral del país desde que el expresidente Raúl Castro lanzó un plan de
reformas en el 2010.
Los emprendedores privados sostienen que las medidas anunciadas en julio reducirían el
crecimiento del sector en un momento en que la economía enfrenta la disminución de la ayuda su
aliado Venezuela y el recrudecimiento del embargo comercial de Estados Unidos bajo el Gobierno
de Donald Trump.
«Creo que esta revaluación de las medidas es positiva. Somos creadores de empleo, innovadores,
somos piezas claves del sector turístico, del transporte y la alimentación. Mis planes estaban a
la espera (…) pero veo un rayito de sol ahora», dijo Camilo Condis, un arrendador de vivienda
y que además trabaja contratado en un restaurante privado de La Habana.
FUENTE: DIARIO EL UNIVERSO (EC)