¿Por qué la guerra comercial no nos afecta de manera significativa como a otras economías emergentes?

–No nos afecta porque principalmente no competimos con los gigantes que están peleando, ni con Estado Unidos ni con China. Por ejemplo, Estados Unidos le ha levantado un muro de aranceles a los autos, a los productos de línea blanca, al aluminio, al acero y otros productos que el Perú no produce.

Nuestro país, en el mercado estadounidense, no tiene ese perfil exportador por lo tanto no nos vemos afectados. En ese escenario lo que podríamos hacer es entrar en la cadena de producción de estos productos finales. Si Estados Unidos quiere elevar su producción de autos podríamos proveerles de bienes intermedios como piezas automotrices o telas para sus asientos.

–¿Cuál sería la ventaja del Perú frente a otros países proveedores?

–Manteniendo el ejemplo de los autos, los principales proveedores son los países asiáticos y ahora Estados Unidos les ha encarecido el ingreso con mayores aranceles. El Perú no está afectado por esa decisión y tiene un tratado de libre comercio (TLC) que nos genera espacios que debemos aprovechar. La guerra comercial es una gran oportunidad para que el Perú eleve sus exportaciones no tradicionales y las diversifique.

–¿La industria peruana está en la capacidad de satisfacer la demanda de Estados Unidos?

–El Perú siempre ha demostrado que está en capacidad, pero también somos conscientes de que la reacción siempre ha sido lenta. Pero pese a esa tardía reacción siempre hemos reaccionado y un claro ejemplo es el sector exportador.

Hoy en día el Perú es el principal exportador de espárragos hacia Estados Unidos y el segundo exportador de quinua. Lo importante es mantener esos niveles y para eso debemos generar cada vez más valor agregado para nuestros productos.

–¿Cuáles son sus expectativas sobre el cierre de exportaciones para este año?

Esperamos por lo menos una exportación cercana a los 50,000 millones de dólares, esto es unos 2,000 millones más de lo que se registró en el 2012 cuando se alcanzó un pico importante.

Para mantenernos debemos seguir con las actuales políticas de Estado en cuanto a comercio y algo muy importante, que no se toma en cuenta, es que la capacidad instalada logística de comercio está llegando al límite.

El 85% de las mercancías en Perú no puede estar saliendo solamente por el Callao. Tenemos que diversificar esa salida y así facilitar el movimiento de mercancías dentro del país. Es ilógico pretender crecer al doble en estas condiciones.

–Según el Banco Central de Reserva, la balanza comercial registrará al cierre del 2018 un superávit de 6,944 millones de dólares ¿Cómo nos posiciona en la región?

–Si lo comparamos con el 2017 (6,571 millones de dólares) estamos hablando que este año habrá un incremento de 5.6%. Entonces, en términos de porcentaje, vamos a estar en el tercio superior de la región.

–¿Cómo nos favorece el crecimiento de Estados Unidos, considerando que se trata de nuestro segundo socio comercial?

–Cada vez que Estados Unidos aumenta su crecimiento al Perú le va bien y esto es directamente proporcional porque la industria y la economía estadounidense están en crecimiento. Al haber más empleo en ese país, la gente tiene más dinero lo cual incide en un mayor consumo. Esto ayuda a países como el Perú que tienen un acceso preferencial.

Por otro lado, también es cierto que nuestras exportaciones han crecido por un aumento en el precio de los minerales. No nos olvidemos que el 75% de las exportaciones son productos tradicionales de los cuales gran parte son mineros.

Pero también han crecido los no tradicionales como por ejemplo la agroexportación y la manufactura. En ese sentido, el objetivo del Perú, para ser un país que crezca de manera sostenida y tenga un comercio exterior sostenible, es que más del 35% de sus exportaciones sean productos no tradicionales y hoy en día estamos a 10 puntos de lograrlo.

Cuando lleguemos al bicentenario deberíamos alcanzar ese objetivo.

Fortalecimiento de la VUCE

El miércoles pasado, el Poder Ejecutivo oficializó la Ley de Fortalecimiento de la Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE), luego que el pasado 3 de octubre del 2018 lo aprobara el Pleno del Congreso de la República.

La Ley Nº 30860 establece los alcances de la VUCE, así como las medidas necesarias para su fortalecimiento y la mejora de los procesos que se realizan mediante esta.

Es un sistema integrado para la facilitación del comercio exterior que, a través de medios electrónicos, permite a las partes involucradas en el comercio exterior y el transporte internacional, intercambiar información para el ingreso, la salida o el tránsito de las mercancías y de los medios de transporte desde o hacia el territorio nacional. Este mecanismo es fundamental para sostener las futuras estrategias que se establecen para diversificar la canasta exportadora.

En esa línea, el exministro Posada participará de la XIII Cumbre Internacional de Comercio Exterior, en que se debatirá sobre las estrategias que plantea el mercado peruano ante cambios en el comercio mundial.

También conversará acerca de las perspectivas sobre la nueva alianza comercial entre Estados Unidos, México y Canadá, y cómo le afectará al Perú.

FUENTE: DIARIO EL PERUANO (PE)