Fósiles hallados en Israel y China, respectivamente, han reavivado el debate sobre el origen de nuestra especie y añaden nuevas piezas a investigaciones de la evolución humana.
El análisis de los fósiles encontrados en una cantera de Nesher Ramla confirmó que no pertenecía a ninguno de los Homo antes descritos, sino que se trata de un ejemplar de una especie inédita que vivió en la región conocida como Levante mediterráneo, al oeste de Oriente Próximo, hace unos 130 mil años.
A pesar de que el Homo de Nesher Ramla también compartió la región y la misma época con el Homo sapiens, el nuevo homínido no comparte rasgos cercanos con nuestra especie, debido a su estructura ósea diferenciada y dientes largos.
El hallazgo publicado en Science journal también amplía la noción recientemente aceptada de que sapiens y Neandertales no fueron los únicos que desarrollaron tecnología. El estudio asegura que este homínido “utilizaba leña como combustible, cocinaba o asaba carne e incluso mantenía fogatas”, además de diseñar herramientas de piedra y huesos, un rasgo que podrían haber aprendido de nuestra especie.
FUENTE: EL TELEGRAFO (EC)