El atún y el camarón se constituyeron en productos de exportación claves durante el año pasado. El ministro de Producción y Comercio Exterior, Iván Ontaneda, ha reconocido que gracias a las ventas externas de ambos rubros, el país obtuvo USD 15 000 millones en el 2020.La oferta exportable de atún se compone principalmente de conservas y lomos de atún.
La industria atunera es una de las actividades más importantes para el ingreso de divisas, tanto del sector pesquero como de las exportaciones no petroleras. De cara al crecimiento de las exportaciones, Gustavo Núñez, presidente del Directorio de Asiservy S.A. y Presidente del Directorio de la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros (Ceipa), señala algunas estrategias.
Entre ellas, la mayor apertura de mercados a través de acuerdos comerciales, la internacionalización de marcas ecuatorianas, la especialización de productos con mayor valor agregado, y la promoción y difusión del compromiso con la pesca regulada y sostenible. Actualmente, los principales mercados de la industria atunera del Ecuador se sitúan en Europa y América Latina, que representan el 72% y 18% respectivamente, seguido de EE.UU. con el 10%.
“Esta dependencia de Ecuador en dos grandes mercados (Europa y Latam) responde principalmente a la falta de acuerdos comerciales. Existen países importadores de conservas de atún como Japón, Arabia Saudí, Australia, o Canadá, donde la presencia de Ecuador es prácticamente inexistente, con lo que se está dejando de atender cerca del 35% del mercado mundial de atún”, señala Núñez.
En cuanto a la internacionalización, el Presidente de Ceipa explica que muchas de las principales plantas atuneras en Ecuador, cuentan con su propia marca en el mercado local, pero no todas han podido llevarla fuera de las fronteras nacionales. “El principal caso de éxito es Nirsa con su marca Real, que se comercializa en varios países de América Latina. Expandir este segmento implica una mayor rentabilidad, aunque viene acompañado de una inversión importante en canales de distribución y marketing”. La llegada de un nuevo Gobierno también es una oportunidad para posicionar mejor a uno de los productos de mayor crecimiento en la oferta exportable no petrolera.
“La acción más concreta es la aplicación de la nueva Ley de Pesca y la implementación de su respectivo reglamento. Esto va a permitir que las reglas sean en igualdad de condiciones para todos los sectores. Así también, la nueva autoridad debe rodearse de profesionales competentes designados de manera transparente y sin compromisos”, indica Núñez.
PERSPECTIVAS 2021
El balance. Las exportaciones ecuatorianas de atún han venido creciendo constantemente en los últimos tres años. Incluso durante el 2020 con la pandemia, las exportaciones crecieron casi el 10%. El escenario. Para el 2021, las perspectivas se mantienen en proporciones muy similares. A pesar del golpe que recibió el ‘food service’ debido a la pandemia, a medida que avancen las vacunaciones y se reabra la hostelería y restauración, se espera que el segmento de pouches se recupere, aunque aún a niveles inferiores a los que se estaban dando antes de la pandemia. La recuperación del sector se daría en el 2022.
FUENTE: EL COMERCIO (EC)