Las aventuras de los enormes mamíferos han cautivado a la nación y cientos de millones de personas comentan su viaje en las redes sociales.
Las autoridades vigilan de cerca la manada mientras atraviesa la exuberante campiña. Más de 400 personas garantizan la seguridad pública y decenas de drones siguen cada uno de sus pasos.
En un intento de mantenerla alejada de las zonas densamente pobladas, incluidos los ocho millones de habitantes de Kumming, convoyes de camiones bloquean las carreteras.
El gobierno local advirtió a los aldeanos que no dejen maíz o sal en sus patios, ya que pueden atraer a los animales.
Las autoridades evacuaron también a los residentes que se encontraban en su camino y distribuyeron más de dos toneladas de comida a los elefantes.
Los expertos no saben por qué el grupo se alejó de su hábitat original, una reserva natural de la provincia.
FUENTE:EL UNIVERSO (EC)