El M. de Educación definiendo los requisitos para la reapertura de escuelas. La asistencia no será obligatoria.
No hacerles caso a las campañas de desinformación es lo que indica Monserrat Creamer, ministra de Educación, al ser consultada por LA HORA sobre el plan de retorno progresivo a las aulas de los estudiantes, de 2.071 escuelas rurales del régimen Costa-Galápagos.
Creamer señala que para la reapertura de las instituciones no hay una fecha. “Estamos definiendo los posibles escenarios, dependiendo del tamaño de las escuelas”.
La aclaración se hace luego de que el presidente de la República, Lenín Moreno, anunciara que el regreso a clases semi-presenciales sería el 15 de julio en las instituciones que tengan menos de 35 estudiantes. “Lo que dijimos es que desde el 15 de julio empieza el proceso y en eso estamos”, reitera Creamer.
Acuerdos con la comunidad
A la primera fase de la educación durante la pandemia se la denominó ‘Aprendemos juntos en casa’. La segunda es el retorno progresivo a las aulas y arrancará con instituciones uni y bidocentes (escuelas comunitarias de menos de 35 alumnos).
El objetivo es que las familias de la ruralidad tengan la opción de acogerse a esta modalidad “o continuar con las herramientas de enseñanza (plataformas digitales y teleeducación), disponibles por parte del Ministerio de Educación”, aclara la institución.
Para Creamer es entendible que exista temor de enviar a los pequeños a la escuela, por lo que la asistencia no será obligatoria. Sin embargo, la Ministra indica que “en algún punto tenemos que volver a la nueva normalidad, solo que con nuevos hábito de convivencia”.
Además de las adecuaciones en infraestructura, la reapertura se hará siempre que exista un acuerdo con la comunidad, los Ministerios de Educación y Salud.
Al momento, con la infraestructura adecuada habría 1021 escuelas de la costa. “Lo que nos falta son los siguientes pasos que son los de inducción tanto a docentes y familias. Pero las escuelas como tal ya están listas”, comenta Creamer.
No crear más pánico
Son muchas las instituciones que piden regresar, dice Creamer, especialmente porque la mayoría de los docentes viven en la misma comunidad.
Pese a esto, representantes de la Unión Nacional de Educadores (UNE) en Santo Domingo de los Tsáchilas, presentaron un oficio en la Defensoría del Pueblo donde señalaron su descontento ante el pronunciamiento de la Ministra de Educación.
Creamer responde que este tipo de acciones pueden crear pánico en las familias, que se debaten entre enviar o no a sus hijos a la escuela. “Estando en un año preelectoral, muy lastimosamente, con ciertos fines políticos se invalida toda medida que pueda venir del Ministerio de Educación (…) Es obligación de las personas que están en puestos de toma de decisiones, gremios que representan a docentes dar apoyo para superar juntos esto”. (AVV)
‘Ser claros en las condiciones de salud’
NOTICIAS / PAÍS
‘No hay fecha para el retorno progresivo a las aulas’
JUN, 25, 2020 |
Realidad. Entrega de guías educativas a familias sin internet.
El M. de Educación definiendo los requisitos para la reapertura de escuelas. La asistencia no será obligatoria.
No hacerles caso a las campañas de desinformación es lo que indica Monserrat Creamer, ministra de Educación, al ser consultada por LA HORA sobre el plan de retorno progresivo a las aulas de los estudiantes, de 2.071 escuelas rurales del régimen Costa-Galápagos.
Creamer señala que para la reapertura de las instituciones no hay una fecha. “Estamos definiendo los posibles escenarios, dependiendo del tamaño de las escuelas”.
La aclaración se hace luego de que el presidente de la República, Lenín Moreno, anunciara que el regreso a clases semi-presenciales sería el 15 de julio en las instituciones que tengan menos de 35 estudiantes. “Lo que dijimos es que desde el 15 de julio empieza el proceso y en eso estamos”, reitera Creamer.
Acuerdos con la comunidad
A la primera fase de la educación durante la pandemia se la denominó ‘Aprendemos juntos en casa’. La segunda es el retorno progresivo a las aulas y arrancará con instituciones uni y bidocentes (escuelas comunitarias de menos de 35 alumnos).
El objetivo es que las familias de la ruralidad tengan la opción de acogerse a esta modalidad “o continuar con las herramientas de enseñanza (plataformas digitales y teleeducación), disponibles por parte del Ministerio de Educación”, aclara la institución.
Para Creamer es entendible que exista temor de enviar a los pequeños a la escuela, por lo que la asistencia no será obligatoria. Sin embargo, la Ministra indica que “en algún punto tenemos que volver a la nueva normalidad, solo que con nuevos hábito de convivencia”.
Además de las adecuaciones en infraestructura, la reapertura se hará siempre que exista un acuerdo con la comunidad, los Ministerios de Educación y Salud.
Al momento, con la infraestructura adecuada habría 1021 escuelas de la costa. “Lo que nos falta son los siguientes pasos que son los de inducción tanto a docentes y familias. Pero las escuelas como tal ya están listas”, comenta Creamer.
No crear más pánico
Son muchas las instituciones que piden regresar, dice Creamer, especialmente porque la mayoría de los docentes viven en la misma comunidad.
Pese a esto, representantes de la Unión Nacional de Educadores (UNE) en Santo Domingo de los Tsáchilas, presentaron un oficio en la Defensoría del Pueblo donde señalaron su descontento ante el pronunciamiento de la Ministra de Educación.
Creamer responde que este tipo de acciones pueden crear pánico en las familias, que se debaten entre enviar o no a sus hijos a la escuela. “Estando en un año preelectoral, muy lastimosamente, con ciertos fines políticos se invalida toda medida que pueda venir del Ministerio de Educación (…) Es obligación de las personas que están en puestos de toma de decisiones, gremios que representan a docentes dar apoyo para superar juntos esto”. (AVV)
‘Ser claros en las condiciones de salud’
María Sol Villagómez, experta en educación de la Universidad Salesiana, considera que antes de volver será indispensable tener claridad del contexto de salud de cada comunidad. “No comparto apresurar el retorno sin saber cómo se ha desarrollado el virus en determinado territorio. Hay que actuar con prudencia”, señala Villagómez y enfatiza que se debe tomar en cuenta que los sectores rurales no tienen “gran acceso a la salud”.
Aconseja que quienes retornen a las aulas lo hagan en grupos pequeños, para evitar un rebrote. “Hay quienes decidirán todavía no volver y, para eso, será importante que las autoridades hagan convenios con las empresas de Internet y doten de este servicio a las comunidades. Lo importante es generar opciones”, resalta.
‘Fijarse en las experiencias internacionales’
Patricia Hidalgo, experta en docencia y PHD en Ciencias Sociales, señala que es importante tomar en cuenta las experiencias internacionales. “En España siguen debatiendo esto, porque hubo un rebrote”.
Hidalgo, directora de la escuela de Comunicación de la Universidad Internacional del Ecuador, considera necesario que el Ministerio a cargo realice una planificación, apoyándose en expertos y no apresurar el proceso de retorno, por lo que aconseja potenciar las radios comunitarias y capacitar a los docentes.
Aclara que, si no hay responsabilidad en el retorno progresivo, las secuelas sociales, sicológicas y académicas que hoy por hoy desarrollan los menores, se agravarán.
“Antes de divulgar la idea del retorno, sería importante presentar el plan que debe ser exhaustivo y que brinde a los padres seguridad”. Patricia Hidalgo, PHD en Ciencias Sociales.
Fuente:Diario La Hora.