Los británicos que rechazan el acuerdo alcanzado por el primer ministro Boris Johnson con la Unión Europea (UE) y aún pendiente de ratificación en el Parlamento, proponen un nuevo referéndum acerca de la salida del bloque.
En un acto electoral, en la localidad de Harlow, el líder laborista, Jeremy Corbyn, prometió a sus seguidores ganar las elecciones y “solucionar el Brexit en seis meses”.
Corbyn en lugar del acuerdo de Johnson propone negociar un pacto mejor con Bruselas y someterlo a referéndum antes de finales del próximo junio. En este, los ciudadanos podrían optar entre ese pacto, en el que el Reino Unido permanecería en la unión aduanera de la Unión Europea y mantendría una relación muy próxima al mercado único, o permanecer en la UE y olvidar el Brexit.
Ayer, el exprimer ministro británico Tony Blair también abogó por realizar un nuevo referéndum. Consideró que el resultado de esta consulta sería diferente a la de hace tres años porque la gente está mejor informada.
El político laborista detalló en la Web Summit (el congreso tecnológico que se celebra esta semana en Lisboa) que el resultado de 2016 fue “un grito de rabia” contra el sistema político y cuestiones como la inmigración.
Sin embargo, el exprimer ministro no se atrevió a anticipar el resultado de las elecciones generales convocadas en el Reino Unido para el 12 de diciembre y consideró que deberían ser más tarde, para no “mezclar” los comicios británicos con el Brexit. Barnier dijo que el “Brexit no es solo el divorcio entre la UE y el Reino Unido pues hay muchas otras consecuencias”, entre ellas la elaboración de una “nueva relación que dé estabilidad”.
Las negociaciones continúan aunque advirtió que aún persiste “el riesgo de caer en un precipicio y todos debemos continuar vigilantes” ante la posibilidad de un Brexit sin acuerdo. Corbyn, por su parte, considera su estrategia “clara y simple”, con un calendario “realista y ejecutable”.
Sin embargo, completar un nuevo acuerdo en tres meses, ratificación incluida y someterlo a referéndum en otros tres es, para los conservadores, “pura fantasía política” que llevaría a “una incertidumbre paralizante”.
En contraparte, la tercera fuerza política, los liberales demócratas, es la única que tiene el claro objetivo de anular el Brexit. (I)
FUENTE: DIARIO EL TELÉGRAFO (EC)