Este segundo domingo de mayo de 2020 fue un Día Universal de la Madre distinto. Se desarrolló en medio del encierro por la pandemia del COVID-19; a pocos días o semanas de que algunas fallecieran; de otras que están hospitalizadas, de tantas que también están en casas de salud atendiendo a enfermos. Un día con la madre distanciada, aislada, para protegerla y sin mirarla por ya más de 45 días de emergencia sanitaria.

Diferente también porque, por el encierro, un gran número de familias han pasado juntas, con su madre, agradeciendo por la salud, por no haber contraído el virus o sucumbido frente a su ataque.

No hubo conciertos ni agasajos masivo. Uno de los pocos, en Guayaquil, lo encabezó el gobernador del Guayas, Pedro Pablo Duart, quien llevó flores, regalos y música para las madres o futuras mamás de la maternidad Matilde Hidalgo de Procel, en el Guasmo. Allí estuvo incluso una parte de la Orquesta Sinfónica.

Pero las actividades clásicas como salir a comer o llevar serenatas se han visto afectadas, sin embargo, el guayaquileño es recursivo y a pesar de la crisis no solo busca cómo homenajear a la reina de la casa, sino también generar dinero.

En redes sociales la venta de postres, arreglos y recuerdos se movió mucho. Los motorizados llegaron a diferentes sectores para realizar decenas de entregas desde muy temprano.

Pero quienes no habían preparado nada para mamá tuvieron también la oportunidad de comprar un pequeño detalle. Durante la mañana del domingo en varios sectores, como La Florida, el suburbio y la isla Trinitaria, se instalaron mesas donde se ofrecían flores, globos y arreglos desde $4 (una taza con chocolates y un globo). Había arreglos de hasta $8.

Junto a ellos estaban también mujeres que vendían cosméticos, todo en medio de las medidas de bioseguridad que estaban entre sus posibilidades. Usaban mascarillas y rociaban alcohol sobre cada producto y sobre el dinero que obtenían.

En los hospitales, las madres también fueron homenajeadas pese al ajetreado movimiento por salvar vidas.

Esta semana, Expoflores llegó con un cargamento de rosas a ocho centros hospitalarios para felicitar a las mamás.

Los cementerios locales realizaron actividades, aunque las visitas aún no están permitidas por el aislamiento.

En Jardines de Esperanza, por ejemplo, los directivos lanzaron al cielo globos rojos y bancos en honor a los miles de madres que habrían fallecido en estas últimas semanas, víctimas del coronavirus. (I)

Fuente: Diario el Universo (EC)