Las conmociones por las que atraviesan las cadenas de suministro están afectando a una parte más amplia de la economía mundial a medida que la pandemia continúa, amenazando con sofocar la recuperación comercial de Asia, de la misma manera que el aumento de las tarifas de los fletes hace más difícil para las empresas capear un nuevo año similar a 2020.
De acuerdo con un reporte de Bloomberg la escasez de bienes de consumo, como las toallas de papel y el equipo para trabajar desde casa, que se produjo a principios de la crisis de Covid-19, ha dado lugar a la escasez de piezas en una de las industrias más integradas a nivel mundial: la fabricación de automóviles.
Volkswagen AG se vio obligada a recortar sus planes de producción en la mayor fábrica de automóviles del mundo, en Alemania, y advirtió que las limitaciones de suministro podrían extenderse por todo el mundo, mientras que Honda Motor Co. está disminuyendo la producción en cinco fábricas en Norteamérica, en su lucha por adquirir los chips utilizados para fabricar automóviles.
«Los cuellos de botella en el lado de la oferta parecen ser más pronunciados en Estados Unidos y Europa, donde los plazos de entrega están disminuyendo nuevamente», dijo Rob Subbaraman, jefe mundial de investigación de macroindustria de Nomura Holdings. «Esto es negativo para la producción industrial en Occidente y debería dar lugar a una mayor reducción de stocks y a una presión al alza de los precios de producción».
A lo anterior se suman los problemas de transporte que afectan a los sectores de consumo y de salud, que todavía se enfrentan a la escasez de contenedores de transporte disponibles para trasladar componentes y productos acabados desde China, Taiwán, Corea del Sur y las demás potencias exportadoras de Asia.
Nerijus Poskus, vicepresidente de Global Oceanic de Flexport, considera que el mundo necesita el equivalente a 500.000 contenedores de 20 pies más, aproximadamente, lo suficiente para llenar 25 de los buques de mayor tamaño para satisfacer la demanda actual. Mientras tanto, las tarifas estándar de los contenedores en las rutas del Transpacífico son el cuádruple de lo que eran hace un año. Y eso es antes de que se añadan los recargos por equipo y las primas por carga garantizada.
FUENTE: MUNDO MARITIMO (CL)